Santiago, Chile: Ataque incendiario a cajero automático del Banco Santander en la Universidad Andrés Bello

12 de marzo de 2014

A pocos días de que jueces y fiscales jueguen y decidan sobre la vida de nuestros compañeros haciendo presente nuevamente el oscuro y siniestro laberinto de castigos ejemplificadores contra quienes se levantan en guerra y ofensiva frente al orden del Estado-Capital, se nos hace necesario expresar la solidaridad de manera concreta para que aquellos verdugos-mercenarios de la libertad sientan el peso de la irrefrenable acción revolucionaria hermanada con la historia de lucha y coherencia de los compañeros acusados del asalto a una sucursal bancaria y muerte del Cabo Luis Moyano, en el año 2007.

Han sido seis años donde el Poder y la prensa dentro de sus dinámicas represivas han hostigado y denostado a los compañeros encarcelados y sus círculos cercanos con burdas tácticas que sobrepasan la misma legalidad que ellos defienden.  En función de los distintos contextos en que se ha desarrollado este seguimiento y juicio político, la autoridad ha demostrado que la muerte del esbirro es el fácil argumento para buscar detener a aquellas/os que hacen de su vida una latente amenaza contra la inercia del actual orden ciudadanista y democrático.

En el marco de la Jornada de Agitación Solidaria Internacionalista del 14 al 25 de Marzo nuestro ataque  pretende ser un cómplice llamado a quienes desbordan la teoría con la irreductible empuñadura de la acción insurreccional para que nuestras convicciones avancen hermosa y desmesuradamente ante los hórridos muros de aquella cárcel de alta seguridad donde se pretende anular la posición de lucha de nuestros compañeros.

Así también tomamos posición recordando y llevando a la calle los nombres e ideas de otros/as compañeros/as encarcelados/as a la largo de ésta Guerra Social en el territorio dominado por el Estado Chileno. Porque tenemos una responsabilidad revolucionaria y frente a la historia, nuestra solidaridad también destruye fronteras, lenguas y banderas, avanzando decididas/os y con el puño en alto cuando se trata de defender a un/a compañero/a presa/o bajo el yugo de otros Estados, comprendiendo que la coordinación de los Poderosos no tiene fronteras.

De la misma forma en que este juicio y sus entramados no deben pasar desapercibidos para quienes se enfrentan a la autoridad, siendo una fuente de experiencia y análisis. Creemos que tampoco otras historias de lucha deben ser olvidadas, la memoria es un arma y recordamos a Johnny Cariqueo, Norma Vergara quienes cayeron en algún mes de marzo.

A tres meses de la muerte de Sebastián Oversluij tras una expropiación.

A pocos meses de cumplirse cinco años de la muerte de Mauricio Morales, defendemos la vida de lucha que los compañeros decidieron llevar para enfrentar al poder y sus dinámicas.