Compañerxs,
En la madrugada del día de la huelga general, 14 de noviembre, dos compañeros, Rodrigo y Rodolfo, fueron detenidos por los cuerpos de represión del Estado en la zona de Matosinhos después de una acción contra sucursales de los monopolios banqueros que rigen tiránica e ilegítimamente nuestras vidas.
Antes de nada, antes de todas las acusaciones y moralismos, tengo que decir a nivel personal que Rodrigo y Rodolfo tienen una plena conciencia, reflexión y conocimiento de lo que, porqué y contra lo que iban a actuar. Rompieron simbólica y físicamente una inviolabilidad física impuesta entre el «ciudadano» común, ser bajo la autoridad estatal, y su opresor, el Capital, en concreto representado por el sistema de créditos monetarios que define una lógica esclavista entre todos los estratos sociales, gestionado y centralizado alrededor de los bancos, fortalezas de integridad virtual instituida por aquellos a los que más les conviene, protegidos por el brazo represivo del Estado, su lacayo, ahora más que nunca empeñado en defender una reestructuración socio-económica de la sociedad esclavista –en un proceso irónicamente denominado «crisis», cuando todo este juego está basado en la lógica monopolista, por cualquier medio– así que nosotrxs responderemos consecuentemente: su destrucción, por cualquier medio posible, pero no en nombre de la ganancia y de la supremacía, sino en nombre de la necesidad, de la supervivencia, tanto individual como colectiva –antes que el fascismo, último vestigio de la cohesión forzada del Estado, se instituya para finalizar la destrucción de la disidencia subversiva enfrentada a sus proyectos.
Rodrigo y Rodolfo fueron conducidos el día 14 de la comisaría al tribunal de Matosinhos, en el que, por el tipo de suceso, fueron transferidos al Tribunal de Instrucción Criminal, estando acusados por daño calificado de valor alto. Actualmente están en la calle a espera de juicio, y hasta entonces quedan con firma periódica en la comisaria.
Ahora más que nunca es necesaria toda la solidaridad con los compañeros víctimas directas de todo el aparato de represión. Recordemos, su primera línea represiva es el «ministerio de información», o sea, la opinión pública instituida, los mass mierda, que golpe por golpe, mentira por mentira, alienado por alienado, intentarán dividir y precondenar a quien quiera que apoye a los compañeros y a su lucha concreta, activa y directa.
¡No dejemos a nuestros compas solos! ¡Tanto por la acción como por la palabra, levantemos la barricada entre nuestras vidas y la esclavitud instituida!
Toda la solidaridad con Rodrigo y Rodolfo.
Acción consecuente frente la violencia institucionalizada.