La noche del domingo 15 de enero del 2017, la sede de la Cruz Roja de Barcelona ha sido atacada con una decena de bombillas de pintura. En la fachada del edificio ha aparecido también una pintada que evidencia la complicidad de la Cruz Roja con el CIE, las deportaciones y el acoso constante a las personas migrantes, tanto en la ciudad como en las fronteras.
Abajo todas las fronteras y sus complices
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