Noche, viernes 14 de abril, volvemos a acercarnos a las repugnantes guaridas de la iglesia, esta vez nuestros pasos llegan hasta el Salón de Asambleas de los Testigos de Jehová. Nuestro odio nos guía, con la intención de hacerlos saltar, para romper de una buena vez con su paz y tranquilidad. Colocamos una bomba de ruido la cual hizo su pega. Ténganlo claro, asquerosos creyentes, la violencia contra ustedes no la para nadie.
Complicidad total con los subversivos Marcelo, Freddy, Juan y saludos a Nicolás Rojas, quien ya se encuentra fuera de los asquerosos muros de la prisión. Fuerza a todxs lxs presxs en guerra.
NI DIOS NI AMO
Círculo Vandálico Sebastián Oversluij
en griego