En la madrugada del domingo 26 de mayo, fue atacado con cócteles molotov el edificio gubernamental de la periferia de Macedonia Oriental y Tracia, en la ciudad de Komotini.
Este fue un gesto mínimo de rabia contra el Estado, sus secuaces y cada estructura autoritaria que nos lleva cada vez más cerca del totalitarismo y la esclavitud.
El ataque fue una respuesta al podrido sistema político que nos aterroriza día a día con el encarcelamiento de lxs que resisten, con impuestos, con salarios y pensiones de miseria, con la violenta represión de huelgas y manifestaciones, con las bandas de fascistas-paraestatales actuando sin que se les moleste, ahí donde el brazo del Poder y la porra de los pacos no llegan para garantizar la continuidad de la dominación y la explotación cubriendo sus verdaderos rostros con máscaras democráticas.
No exigimos mejores condiciones de esclavitud; sino que luchamos por la destrucción completa del Poder.
Nos proclamamos negadorxs de esta sociedad y la miserable vida que nos ofrecen, pasando a la ofensiva.
Envíamos también un mensaje a lxs jueces/zas y al Estado: nuestrxs compañerxs, quienes pasan sus días y sus noches en las celdas de la democracia y del Capital, que ustedes denominan “instituciones correccionales”, NO ESTÁN SOLXS.