Nuevamente un compañero es seguido y obligado a presentarse en Inteligencia para luego pasar a declarar ante un juez. Esto no es nuevo, es otro ataque al movimiento y por eso respondemos colectivamente. Somos conscientes de la lucha en la que estamos.
Las fuerzas represivas del Estado continúan atacando a nuestros compañeros hace mucho y seguirán en su función, cada vez más duramente mientras sigamos fortaleciéndonos, mientras la resistencia continúe, mientras la lucha avance en la calle…
¿Por qué a nuestros compañeros se les hace pasar por Inteligencia siempre antes de pasar a juez? ¿Por qué se jactan ante ellos de saber en dónde viven y que lugares frecuentan? La respuesta es simple, porque nos temen, porque intentan amedrentarnos, hacernos sentir temor ante algo a lo cual no esquivamos: nuestra responsabilidad.
Esta vez, los hechos por los cuáles se los va a buscar son los ocurridos en la marcha del 8 de marzo, donde un periodista dice ser agredido por un grupo de manifestantes.
Mientras la prensa crea tesis absurdas sobre militantes pagos, reuniones con la extrema derecha, marcan personas ante los cuerpos represivos, y hacen de jueces sin pudor de mandar al palo a sus víctimas; mientras la policía se infiltra en las marchas o ataca a los manifestantes en las calles; Inteligencia se ocupa de hacer registros de los luchadores y de intentar generarles terror.
Ya tenemos claro cómo funciona la prensa, cuál es su rol y lo hemos dicho muchas veces. Mientras la prensa apunta, es la policía la que dispara, los servicios de inteligencia en este caso.
El mundo vive momentos de reestructuración que también afectan a este territorio, las ciudades se militarizan, los populismos de izquierda dan lugar a nuevas aperturas de mercado usando las estructuras represivas que ellos les dejaron. La suerte para los refractarios del orden esta echada, es sólo la lucha contra todo poder la que puede cambiar el rumbo de los más terribles modos de dominación.
Nosotros no nos vamos a ir a ningún lado, hemos estado y seguiremos acá, somos parte de la rebelión continua de los barrios, no hacemos política, no tenemos ninguna solución mágica que vender a incautos buscando votos o comprando su fe. Potenciamos la resistencia social, fuera y contraria a toda estructura jerárquica, fuera y contraria, también, a todo espíritu de derrota o fracaso.
Ningún compañero esta solo, tocan a uno, tocan a todos.
Anarquistas.
en Portugués.