La sala de audiencias del tribunal de Degleri, dónde se esperaba que comience en el 16 de septiembre, el juicio de los anarquistas Simos Seisidis y Aris Seirinidis, estaba llena, desde la mañana, de policías secretas (no se sabe si estos bastardos pertenecen a las fuerzas oficiales o si hacen parte de los mecanismos paraestatales del Poder). La entrada de la sala estaba bloqueada por una brigada de las unidades Y.M.E.T. (unidades antidisturbios vestidas con uniformes azules que sirven como complementarias de las fuerzas de MAT). Fuera de la corte había por lo menos dos escuadrones más de la policía antidisturbios (MAT). Del escenario no le faltaba un equipo de las brigadas «antiterroristas», con todos sus miembros encapuchados y armados con armas pesadas.
Los cerca de 60 solidarixs con los dos anarquistas comenzamos a gritar y a exigir que se vayan de la sala los policías secretas para que sea posible asistir al proceso. En algún momento, mientras que unxs solidarixs habían logrado entrar en la sala, lxs que estábamos fuera nos dimos cuenta que una pelea se estaba desarrollando. El asesino Panagiotis Bokos, quien disparó, por la espalda y a sangre fría, contra Simos Seisidis (lo que le causó graves lesiones que resultaron en la amputación de su pierna derecha), fue identificado por lxs compas y las fuerzas represivas intentaron empujarnos atrás.
La paliza terminó poco después y permanecimos en el lugar a la espera de los resultados. Finalmente, el tribunal anunció que el juicio continuará el Miércoles, 28 de septiembre. La mayoría de lxs solidarixs salimos de la corte en pequeños grupos, mientras que algunxs se quedaron para mostrar su solidaridad con Simos Seisidis durante su traslado. Los policías siguieron a las personas que salían del tribunal y las atacaron por lo menos en dos ocasiones: una, en la calle Degleri contra tres compañeros y una más en el cruce de la calle Loukareos y la avenida Alexandras.
El día anterior, 15 de septiembre, se llevó a cabo una marcha de motos en solidaridad con los dos anarquistas perseguidos. La marcha de más de 100 motos comenzó a partir de los Propileos, en la calle Panepistimiou, y se movió a través de las calles del centro de Atenas terminando en el barrio de Exarchia