El 21 de abril por la tarde, varias personas empujadas por un deseo de expresar solidaridad con nuestrxs compas anarquistas en huelga de hambre en las prisiones griegas, llevamos pancartas y panfletos a algunas calles de Londres para celebrar los valores rebeldes de dignidad y lucha por la libertad.
El área, Peckham al sur de Londres, fue el escenario de la dura rebelión durante los disturbios de agosto’11, una lucha en la que nosotrxs. y mucha gente con la que nos encontramos, valoramos y deseamos extender. La policía y los medios de comunicación han estado trabajando diligentemente para extinguir las pasiones rebeldes y crear un clima de sumisión y sospecha, condenando a lxs rebeldes y recompensando a lxs chivatxs, realizando miles de detenciones y cientos de encarcelamientos, mediante una fabricada imagen pública de aprobación ciudadanista.
Al salir, esa tarde lluviosa encontramos la confirmación de lo que ya estamos convencidxs – que existe una conspiración de corazones rebeldes, cuyas aspiraciones infinitas por la libertad van más allá de toda prisión y estructura de control. A veces, encuentros pasajeros perforan el velo del aislamiento urbano, saliendo de la tierra del cementerio de hábitos para vislumbrar fugazmente la posibilidad de una futura connivencia de espíritus desafiantes. No necesitamos esperar hasta el próximo asesinato policial para armar nuestra rabia y dirigirla hacia el enemigo.
¡Complicidad con lxs presxs en huelga de hambre!
Por la destrucción de lo existente.
Panfleto repartido:
DONDE HAY DIGNIDAD, HAY REVUELTA
SOLIDARIDAD CON LOS HUELGUISTAS DE HAMBRE EN LAS PRISIONES GRIEGAS
La vida ha sido reducida a poco más que una cuestión de estadísticas. Cada día las cabezas parlantes de los medios de comunicación despliegan porcentajes, estadísticas de mortalidad, números de desempleadxs, cifras de víctimas de muertes y heridxs en la gran masacre de la vida cotidiana. Guardianes fieles del encierro de los ricos, dicen que nuestra elección es el sacrificio y la obediencia borregil o el aislamiento y la criminalización como enemigxs de la sociedad. Somos ‘lxs malxs’, ‘la escoria’, el enemigo interno… Centran la atención en actos aislados que provienen de dramas personales o de guettos de aburrimiento para justificar el Estado policial que se fortalece cada día. Promocionan una cultura delatora, glorificando la escoria que se chiva a la policía de sus vecinxs, incluso de miembros de su familia. Todxs sabemos quiénes son nuestrxs enemigxs: los ricos, la policía, los políticos, los periodistas mentirosos, todos los opresores de la gente.
Lo que los medios no nos dicen es que por todo el planeta lxs jóvenes, y también lxs no tan jóvenes, están saliendo a las calles para rebelarse. Contra la codicia sin límites de aquellxs que dominan y oprimen en nombre del beneficio. Traer la llama de la vida a nuestra gris existencia y devolver nuestra rabia contra los opresores, mejor que contra nosotrxs mismxs. A través de las fronteras.
DE LONDRES A GRECIA – ¡COMBATE A LA POLICÍA!
Cuando queremos algo – sobre todo, libertad y dignidad- tenemos que pelear duro por ello, con nuestra gente, contra la ‘Ley y Orden’ del sistema. Ningún político merece más que nuestro desprecio, definitivamente ninguna confianza. El año pasado, en este país, vimos miles de jóvenes en las calles rebelándose contra las tasas universitarias en, al menos, dos ocasiones. En agosto el país entero se prendió en llamas por el asesinato policial de Mark Duggan, en una rebelión que comenzó por la ira contra la policía y pronto se convirtió en una revuelta social extendida que iluminó con fuego los centros monótonos de la ciudades. Se expropiaron montañas de basura de las tiendas, basura que un montón de gente se esclaviza para producir, y otro montón se esclaviza para comprar. Aquí los medios no fallaron en hacer su trabajo de criminalición de la revuelta y enseñaron sus verdaderos colores publicando fotos de CCTV (circuito cerrado de televisión) de rebeldes, suministradas por la policía.
En Grecia, que ha estado en los titulares durante meses porque, a pesar de los brutales recortes y las ‘medidas de austeridad’ contra lxs griegxs, la economía del Estado ha quebrado y al formar de la gran mafia de banqueros (la Eurozona), las otras economías del Estado europeo se han apresurado a «darle la libertad bajo fianza» a Grecia. El efecto ha sido el casi colapso total de la vida social y económica allí, siempre bajo el foco de los medios de comunicación mundiales, resultando en la presentación de lxs griegxs como beneficiarixs de caridad que ‘nos pertenecen a nosotrxs’.
AUTOORGANIZÉMONOS Y ATAQUEMOS PARA LIBERARNOS
Lo que no se dice es que hay una situación de rebelión constante, ataque y solidaridad entre muchxs de lxs griegxs, miles de anarquistas incluidxs. Manifestaciones en las calles, que ahora han llegado a atacar hasta el Parlamento. Asambleas de vecinxs para contraatacar cuando a la gente se le corta la electricidad porque no puede pagar la factura – la gente se junta y se ayuda para reconectar la línea. Grupos de anarquistas llenan carros de comida en supermercados y salen con ellos para distribuirla gratis en el mercado local junto con folletos, instando a otrxs a hacer lo mismo. Otros grupos salen a plena luz del día a atacar cámaras CCTV en las principales calles, hasta el punto que prácticamente no queda ni una en pie.
Nosotrxs estamos viviendo la militarización de Londres para la preparación de los JJOO, algo por lo que la gente de Atenas ya vivió en 2004. Se llevaron a cabo muchos actos de sabotaje, manis, etc., expresando la ira por el absurdo gasto del enorme operativo de seguridad que dejó muchas deudas que hoy afectan las vidas de todxs. Se están vendiendo los Juegos de Londres como un gran acontecimiento que une a todxs y mejorará las vidas de la gente con su ejemplo de ‘excelencia’, aunque sabemos que todas las empresas detrás de las Olimpiadas son los verdaderos terroristas del planeta. Todxs podemos ver que es sólo otra excusa para tener más bajo llave esta sociedad carcelaria, echando a gente de sus casas en Londres para hacer oficinas de negocios y yuppies.
La solidaridad significa alzarse por lxs demás y no dejar que el Poder y sus servidores (políticos, polis, medios, etc) usen sus técnicas de ‘divide y gobernarás’. Nuestra solidaridad no tiene nada que ver con la falsa comunidad nacional celebrada por la bandera ondeante de Reino Unido en torno a las Olimpiadas, manteniendo la sucia historia del racismo imperialista de otra forma. Significa permanecer fuertes en nuestras formas diversas de lucha por la libertad. Dignidad y autorrespeto en lugar de lamidas de culo y delaciones. Significa enterarnos de quiénes son nuestrxs verdaderxs enemigxs y auto-organizarnos, con aquellxs que conocemos y en quien confiamos, en pequeños grupos sin líderes, buscando la alegría en nuestros ataques, grandes o pequeños, a los opresores y las estructuras de la actual sociedad carcelaria, por un mundo sin jefes ni esclavxs.
La solidaridad revolucionaria no son sólo palabras. Hoy hemos salido a las calles para traer a primer plano la huelga de hambre de varios presos anarquistas en Grecia porque su lucha es la nuestra.
Nueve anarquistas revolucionarixs están, actualmente, en huelga de hambre en Grecia, luchando por la dignidad y la libertad.
Hay incontables insurgentes encarceladxs en el mundo por no haber bajado la cabeza ante este sistema de muerte.