Los policias y los jueces no son invulnerables. No importa la cantidad de materiales que llevan consigo los primeros, ni cuanto majestuosos parecen ser desde sus sillones los segundos, tampoco importa el alto nivel de colaboración entre ambos. Son fieles esclavos de sus patrones, fieles siervos y defensores de la miseria social. Uno entre ellos es también el paco Vaios Gounaris, quien fue testigo de acusación en el juicio que enfrentaron algunos compas por la realización de un concierto de apoyo financiero para lxs presxs y responsable por las enormes multas que les impusieron. Nosotrxs no vamos a quejarnos por el «injusto» veredicto, porque su postura contra todxs aquellxs que luchan se da por sentada. Nosotrxs no les olvidamos, recordándoles que cada opción conlleva un coste. El coste de las multas por las que es responsable este paco fue un vehículo rebentado y bastante tinta echada en su interior.
Entre su pánico, Gounaris rapidamente cambió de lugar de estacionamiento, olvidando que sabemos donde habita y que esto es lo primordial (a parte de ser puercos, algunos son también avestruzes). Para que lo sepan más compas en la ciudad, su casa está ubicada en el último edificio de la calle Bouboulinas.
SOLIDARIDAD CON AQUELLXS PERSEGUIDXS POR SU ACCIÓN SUBVERSIVA