Prisiones chilenas: Comunicado de Marcelo Villarroel en memoria del compañero Claudio Paredes

Recibido el 01/02/2021:

CARTA DESDE LA CARCEL DE ALTA SEGURIDAD: EN MEMORIA POR UN NUEVO 31 DE ENERO

A través de estas palabras, que vienen cargadas de memoria, de historias de lucha y resistencia, estas palabras que se fugan desde la cárcel de alta seguridad, quiero compartir con ustedes un momento de tantos que han ido configurando nuestra historia de lucha como parte de las realidades de lxs explotadxs de este país que durante generaciones han entregado lo mejor de sí para ver una realidad libre de opresión y miseria.

Es como la memoria se retrotrae en el tiempo y viajo hacia los últimos días de enero, los primeros días de febrero de 1988. Yo todavía no cumplía 15 años, militaba ya en el movimiento Lautaro, en el movimiento estudiantil, en el cual tuve la oportunidad de conocer a mucha gente, compañeras y compañeros de diferentes organizaciones y militancias arraigadas en la escuela roja del marxismo leninismo, organizaciones que, en la época, eran las que bregaban de manera continua contra la dictadura. Entre los tantos compañerxs del movimiento estudiantil secundario, me tocó conocer a un grupo del aplicación, muchachos aguerridos que siempre estaban en la primera línea de la barricada de Cumming con la Alameda, arrancando de la policía en momentos tensos y bélicos, donde el movimiento estudiantil secundario era reprimido por la CNI, entre medio muchas veces arrancando de civiles quienes eran los que arremetían en contra de las movilizaciones generadas desde los liceos del centro de Santiago, en los cuales el aplicación siempre tuvo un rol inevitablemente determinante, por el lugar donde estaba, por el activo de su gente y por las convocatorias organizadas en el punto de encuentro de Cumming con la alameda.

Ahí conocí a Claudio Paredes, “el Diablo” le decían, tuve la oportunidad de conocerlo años previos al interior del FUDEM, una estructura que era parte del comité de organizaciones de enseñanza media COEM, miembro de la FESES: federación de estudiantes de stgo de chile. Era el lugar de reunión de todxs aquellxs que de manera militante y a través del espacio estudiantil de enseñanza media, estaban activando con prácticas cotidianas, desde tomas de colegios, barricadas fuera de los colegios, organizaciones de comités de autodefensa, de los llamados comités democráticos; todos aquellos ejes rectores de la organización de la época que nos permitían nutrirnos cada una de las organizaciones que tenían militantes al interior de este frente estudiantil, como a aquellxs que sin tener militancias se incorporaban a las dinámicas que este frente estudiantil proponía como lucha permanente contra la dictadura.

Fue un día domingo, aun lo recuerdo. La noticia se expandió por todos los lugares, en ese tiempo el control mediático era de DINACOS, la dirección nacional de comunicaciones del ejército, que era la que transmitía la versión oficial de cada cosa que salía. En ese tiempo, aún recuerdo por las noticias del 7, las características macabras del tremendo estallido que reventó un departamento al interior de la Villa Portales, nadie sabía quién estaba herido o muerto. Al pasar de las horas, recuerdo el lunes, en donde nos encontramos con diferentes compañeras y compañeros, preparando los trabajos voluntarios de la época, en donde el estupor se apoderaba de quienes conocíamos a Claudio Paredes, pero habíamos dejado de vernos por diferencias generacionales y también por las responsabilidades de cada cual en su universo militante. Sin embargo, nos volvimos a encontrar en calidad de uno de los compañeros muertos al interior de ese departamento.

No sabemos las razones, yo no las recuerdo en detalle, ni las razones que dio la prensa, ni las ideas y teorías que tuvieron diferentes personas que hablaron del hecho, más bien creo que eso a estas alturas de la vida no importa. Lo que importa es que la memoria está viva, el recuerdo no es tan solo una herramienta para la nostalgia, sino que nos permite mirar en retrospectiva cada hecho que, a través de la conspiración, va generando practicas antagónicas en contra de lo existente y que también da cuenta del inevitable peligro que contempla el hecho de cruzar la ilegalidad como forma activa de participar en los destinos de un lugar.

Recordar a estos compañeros, claramente es parte de la tarea obligada de quienes inevitablemente vamos atizando el fuego rebelde de la revuelta a través de nuestra practica incendiaria, nuestra manera de ver y entender el mundo, la lucha, el quehacer cotidiano cargado de memoria.

Recordar aquellos hechos es traer para acá a nuestros compañeros y compañeras que perdieron la vida entregando lo mejor de sí en contra de Pinochet y su sistema de mierda que fue prolongado en el tiempo a través de este recambio burgués generado con el imperio y el capital, para que en este país todo y nada cambiara.

Un abrazo fraterno a quienes escuchan la radio, a quienes han tenido la oportunidad de participar en este programa especial, a quienes de algún modo van permitiendo destruir la amnesia en la que reina y se mantiene el poder y el status quo que de algún modo les sirve para la prolongación de su podrida paz social.

Con toda la memoria viva, con todas las ideas de transformación con un antagonismo subversivo, autónomo, libertario y activo luchando contra las cárceles.

Hasta la destrucción del último bastión de la sociedad carcelaria.
Mientras exista miseria habrá rebelión.
Por cada uno de los compañeros y compañeras caídas, por lxs de ayer, por lxs de hoy, por lxs de mañana.
Contra la cárcel y el capital: Guerra Social!!

Marcelo Villarroel Sepúlveda
Cárcel de Alta Seguridad
31 Enero 2021

Nota: El texto del compañero Marcelo fue enviado como aporte a la memoria combativa para la Radio 31 de Enero, proyecto radial contrainformativo impulsado desde la Villa Portales en Santiago de Chile. Por último, dejamos un vídeo (ver aquí), además de un programa especial que fue realizado para la fecha conmemorativa por lxs compañerxs (escuchar aquí).