Recibido el 26/02/2024:
¡Ante la devastación: sabotaje y guerra! Así como lo han entendido lxs compañerxs que levantan y se hacen parte de la campaña “Switch Off! The system of destruction” (Apagar! El sistema de destrucción), consistente en el “ataque contra empresas e infraestructuras que alimentan la catástrofe ecológica en todo el mundo”. También aquí, en Abya Yala (nombre ancestral del territorio conocido como América), se han desarrollado múltiples luchas por la defensa de la tierra, desde los pueblos precoloniales que aún combaten, hasta nuevas perspectivas anárquicas que se vuelcan cada vez más hacia la lucha por la tierra. Si bien no estamos exentxs de no poder detener totalmente la catástrofe ecológica, podemos encontrar ejemplos concretos de victorias territoriales que han logrado frenar, expulsar o al menos hacer retroceder considerablemente la materialización de proyectos extractivistas, como lo hace la resistencia y ofensiva armada de diversas organizaciones mapuche en Wallmapu. Las luchas en las distintas latitudes no son ajenas entre sí y apuntan hacia los mismos enemigos. Por esto creemos propicio fraternar y hacer propia la campaña “Switch Off!” dotándola de nuestras propias circunstancias territoriales y así no pasar por alto nuestras particularidades.
A lo largo de la historia de Abya Yala, esta se ha caracterizado por ser saqueada y ultrajada por diversas manos imperialistas y poderosos grupos económicos, tanto locales como transcontinentales, pertenecientes a la misma maquinaria de explotación y saqueo. Hoy seguimos siendo piedra angular del capitalismo y su nueva vuelta de tuerca el “capitalismo verde”, la supuesta versión “sustentable” de éste, encontrándonos con nuevos intereses que perpetúan el ecocidio como lo es la extracción del litio que hoy toma un rol fundamental para la reformulación del sistema de depredación como lo fue en su momento el petróleo, del cual ya conocemos sobradamente sus nefastas consecuencias. Es así como continúan las lógicas parasitarias sobre los territorios “en vías de desarrollo” o “tercer mundistas” que a costa del ultraje posibilitan y sustentan el estatus y calidad de vida del “primer mundo”.
Pero ante las múltiples formas de explotación, también son múltiples las expresiones de combate y resistencia que se llevan a cabo en los diversos territorios. Así lo demuestran las confrontaciones de las comunidades que habitan la selva amazónica contra la deforestación, el desplazamiento y la destrucción de los ecosistemas, situación que se repite por todo el continente. También las distintas luchas ambientales, especialmente perseguidas por todas las inteligencias estatales, su brazo armado y el sicariato empresarial, dejando ver la incomodidad y molestia que generan en el poder estos conflictos aun cuando sean parciales o incluso abordados solo por la vía legal. Así mismo, está la ofensiva anárquica que se hace parte de estos conflictos, como al norte del continente donde las compañeras de la “Coordinadora de mujeres anarquistas por la defensa de nuestro cuerpo-territorio” sabotean las obras del proyecto ecocida “Tren Maya” o como la resistencia en el campamento de defensa en el “bosque milenario de Atlanta” sobre el que se pretende construir un centro de entrenamiento policial, lugar donde fue asesinado en enfrentamientos el compañero anarquista “Tortuguita”. Por otra parte, la situación al sur del continente es bastante similar, como en el territorio dominado por el estado de chile, donde estos ataques proliferan y se expanden: en la región del Maule, el “Grupo Autónomo Revolucionario del Maule” ataca maquinaria de una empresa de áridos y asfaltos; en la Región Metropolitana la “Célula Anárkika Boske Negro” ataca una antena de telecomunicaciones ubicada en un cerro urbano, la “Célula Insurreccional por el Maipo – Nueva Subversión” ataca una empresa de áridos y una empresa de frigorífico y faenadora cárnica, ambas emplazadas a lo largo del mismo rio, y las “Nuevas Subversiones Anárquicas – Célula Alex Nuñez – FAI” que atacan con explosivo a la empresa “Oxiquim”, por nombrar algunas de las reivindicaciones del último periodo, sin dejar de considerar y valorar otros ataques que sin ser explícitamente por la tierra, apuntan y atacan al mismo poder que depreda el planeta.
Considerando nuestras similitudes y particularidades, así como las urgencias y necesidades que nos convocan, nos parece pertinente adherir acciones contra la máquina depredadora del continente y el mundo a la campaña “Switch Off!”, de cara a potenciar nuestras luchas y profundizar el combate contra lo existente y su carácter históricamente internacionalista, visibilizando mundialmente la urgencia de negarse en la práctica a esta realidad con todo lo que tengamos a mano, demostrando por medio de la acción que es posible combatirles, devolviendo el daño a los mayores responsables y creadores de estas condiciones y que es posible abrazar una vida digna que rompa con la miseria en la que nos quieren asfixiar y sepultar.
“Recuerda que los mecanismos de subyugación y control nos rodean. Donde quiera que estés, no necesitas aventurarte muy lejos para encontrar las venas de la industria; sal y córtalas”.
Rescatamos la memoria de la compañera Emilia Bau, quien es asesinada en un conflicto por la defensa de las aguas en territorio Mapuche, al compañero Santiago Maldonado que se hizo parte de la lucha Mapuche y que en enfrentamientos con la policía es desaparecido por el estado argentino y luego encontrado sin vida. Así también a los weichafes Matías Catrileo y Pablo Marchant, quienes son asesinados por la policía en Wallmapu mientras ejercían el control territorial y el sabotaje, respectivamente, contra colonos y forestales.
Libertad a lxs presxs anarquistas, subversivxs y mapuche!!
Por la anarquía, por la tierra, por nuestras vidas.
Célula Insurreccional por el Maipo – Nueva Subversión
Fuente:
//informativoanarquista.noblogs.org/post/2024/02/26/chile-el-conflicto-en-abya-yala-y-sus-cercanias-al-switch-off-palabras-anarquicas-respecto-a-la-necesaria-lucha-por-la-tierra/