Grecia: Texto de los compas anarquistas Sokratis Tzifkas, Babis Tsilianidis, Dimitris Dimtsiadis

Jueves, 23 de agosto de 2012

LA GUERRA CIVIL SOCIAL
NO SE VA DE VACACIONES

Con los contrastes y contradicciones de la sociedad capitalista aumentando y haciéndose más y más visibles y con el fantasma de la insurrección acechando los sueños de los dominadores de este mundo, los que dirigen nuestras vidas tienen una última carta que jugar: la represión.

La difusión de las percepciones fascistas, los pogromos racistas a migrantes y las apuñaladas democráticas que los acompañan, el aumento del control policial y panóptico, la propaganda del miedo, reproducida por la Prensa, la fortificación legal del régimen contra lxs anarquistas y revolucionarixs que luchan por la liberación de la vida son los movimientos en pánico esperados de un régimen que, estando en suspenso, intenta ofrecer lo único que le queda: terror y seguridad.

Así, después de asegurarse de haber roto todo significado de comunidad entre lxs combatientes, repartiendo a granel identidades falsas y separaciones (violentx-no violentx, guerrillerxs-movimentistas, armadxs-okupas, griegxs-migrantes, legales-ilegales, etc.) –y aquí se debe plantear un gran debate sobre cuánto las reproducimos nosotrxs mismxs–, la limpieza ha comenzado: después de intentar enterrar a unxs 50 anarquistas durante los dos últimos años bajo alambre de púas y hormigón (guerrillerxs y no), después de enviar maderos a ocuparse del “problema de la migración”, después de aplastar –a un gran precio, por supuesto– las docenas de manifestaciones militantes –pequeños festivales de violencia liberadora y encuentro de insurgentes–, tenía que enviar un mensaje claro a las okupas durante el verano que, por desgracia, fue un pequeño bache para las luchas liberadoras colectivas.

Acto I
Un  día después de que una manifestación de compas disolviera una concentración de miembros de Amanecer Dorado (Chrissi Avgi) en Agrinio, echándolos a la mierda y demostrando que las calles pertenecían y pertenecen a lxs insurgentes, se coloca un artefacto incendiario en la okupa Apertus. Unos días después y tras un llamamiento de colectivos y okupas de la zona, se lleva a cabo una mani con 350 anarquistas/antiautoritarixs/antifascistas en las calles principales de la ciudad, dejando claro que cualquier ataque contra luchadorxs y okupas recibirá como respuesta la unión de las comunidades combativas de la lucha anarquista.

Acto II
Dos días después, hay un ataque incendiario contra la okupa Draka, en la isla de Corfú. Colocado por manos fascistas en beneficio del Estado, ya que el hospital al que pertenece el edificio, después del ataque incendiario, le planteó a la fiscalía que quería usarlo, después de haberlo dejado pudrirse durante años. Docenas de intervenciones/concentraciones/distribuiciones de textos tuvieron lugar en muchas ciudades de Grecia como señal de solidaridad.

Acto III
A principios de agosto, durante el período más “muerto”, se suceden varios intentos de cortar la electricidad a la okupa Delta, en Tesalónica, bajo órdenes del Instituto de Formación Técnica (TEI) al que pertenece el edificio. También hubo concentraciones, distribuciones de textos, además de vigilancia del edificio para evitar que algo así sucediera y finalmente todo se pospuso durante un mes, pasando a ser asunto de la fiscalía. Aquí nos gustaría recordar que un incidente similar tuvo lugar en la okupa VOX a finales de junio. Cuando la empresa de electricidad intentó cortar la electricidad y no lo consiguió después de la intervención de lxs okupas.

Apostando por el periodo estival y la “pausa” informal de las luchas, el Estado y sus chivatos, todo tipo de fascistas, intentaron reformular el mensaje de guerra hacia lxs okupas, pero lo ampliaron a las comunidades de la lucha anarquista en el territorio griego. Aunque fracasaron. Cosa que se repetirá, si se olvidan de que lxs anarquistas/antiautoritarxs ya participan conscientemente en la batalla no pacífica entre las fuerzas de la libertad y las fuerzas de la esclavitud.

Cosa que se repetirá, basta que no olvidemos la necesidad de una mayor organización/colectivización por nuestra parte dirigida a la agudización de las hostilidades contra la maquinaría estatal y la lucha sin tregua por la liberación individual y colectiva.

Una lucha que no se permite el lujo de ceder espacio y tiempo al enemigo sin presentar batalla.

Si hay algo que necesita afianzarse y extenderse son las elecciones determinadas, la solidaridad en las relaciones entre lxs insurgentes, el rechazo a dividir nuestra lucha con criterios como las vacaciones o las  “habilidades revolucionarias”.

Todos los hechos que hemos mencionado, en la medida en que se produjeron en cada ocasión, hablaron por sí mismos.

A pesar de ello, continuamos la lucha contra los Estados, las fronteras y los fascistas, contra los manicomios y las prisiones, contra el capitalismo y las drogas que vende, contra el sexismo y la dominación, contra la destrucción del medio ambiente y las policías de la sociedad, y sentimos la necesidad de enviar saludos y fuerza a lxs callejerxs que, en cada ocasión, agudizan la lucha por la liberación humana-natural de las cadenas autoritarias, dándonos, sin saberlo, un poco de su pasión, su fuerza y su coraje.

En las fértiles condiciones sociales que atravesamos, plantemos la semilla de la anarquía para que se abra la flor de la liberación total. Organicémonos en comunidades antijerárquicas militantes y confirmémosles al Estado y los fascistas las peores expectativas que tienen en mente.

Atrevámonos y sigamos atreviéndonos.

Dentro y fuera de las prisiones, coordinemos nuestros corazones y luchas contra el Estado y el capitalismo.

Solidaridad con las okupas Apertus (Agrinio), Draka (Corfú), Delta (Tesalónika)

Sokratis Tzifkas
Babis Tsilianidis
Dimitris Dimtsiadis

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