Todo lo que la policía y los funcionarios ejecutan en las calles con control y represión se legitima y consigue a través de los tribunales. Día a día, deciden en su teatro de la «justicia» sobre el futuro de la gente, le castigan, le encarcelan y destruyen vidas. La verdad es que unas cuantas piedras y un poco de pintura no es mucho que lanzar contra un edificio del Poder, pero la idea de una vida libre es la mayor de sus pesadillas porque supondría su fin, el fin de la opresión.
¡Que este ataque dé fuerzas a lxs que se sientan en el banquillo de lxs acusadxs y les arruine más de un día a lxs que entran en las salas de justicia como siervxs o soplonxs!
Fuerza a lxs afectadxs por las redadas en la casas de Berlín el 14 de agosto porque la policía buscaba culpables de los ataques a las opresivas oficinas y agencias de empleo y de una acción en solidaridad con la revuelta de Turquía. Entendemos estas acciones como importantes y correctas, sin importar quién las haya hecho.