El miércoles, 20 de noviembre, sobre las 18:00, nos concentramos unas 150 personas en la parte trasera de la prisión de Larisa, donde teníamos contacto visual con la celda del compañero y preso en lucha, Spyros Stratoulis.
Spyros se encuentra en el 13er día de huelga de hambre, que inició el 11 de noviembre, denunciado el tratamiento penal de las autoridades y exigiendo el cese del procedimiento vengativo e inexistente que le implica la privación de permisos de salida (que hasta ahora habían pasado de forma normal), además del derecho a la suspensión de la pena.
En la hora y media que estuvimos allí, intentamos enviar un mensaje solidario y de apoyo lo más fuerte posible a través de consignas y bengalas y, durante un rato, derribar los muros que nos separan, mientras uníamos nuestras voces con la del compañero y del resto de presos de la cárcel.
También disponíamos de un sistema de sonido para leer textos en solidaridad con Spyros. La concentración recibió el apoyo de compas de las ciudades de Tesalónica, Volos, Karditsa, Kozani, Xanthi, Veria y Larisa.