El jueves, 13 de marzo de 2014, de madrugada, el centro administrativo del barrio de Blasewitz, en la ciudad de Dresde, fue atacado con piedras, terminando reventadas varias de las ventanas del edificio. Esta acción, hay que entenderla como una expresión de solidaridad con la manifestación antirepresiva convocada para el 22 de marzo en Berlín. Las estructuras represivas del Estado llevan arraigándose profundamente desde hace mucho tiempo. Ya es la hora de combatirlas con todos los medios posibles.
Por esta razón, este fin de semana, desde Dresde hasta Berlín: ¡liberamos nuestro odio contra su represión!