[Prisiones Italianas] Solidaridad revolucionaria con el compañero anarquista Alfredo Cospito

Traducción recibida el 07/05/2022:

El jueves 5 de mayo el anarquista preso Alfredo Cospito ha recibido una notificación de la disposición en su contra del régimen penitenciario del 41 bis. Actualmente Alfredo sigue detenido en la prisión de Terni, en la dedicada sección. No sabemos si este es un destino temporal y si a este le seguirá un traslado a otra institución. El decreto ha sido dispuesto, como prevee la norma, directamente por la ministra de Justicia Marta Cartabia, ya presidenta de la corte constitucional. Recordamos, muy brevemente, que el 41 bis es un régimen penitenciario particularmente aflictivo, que prevé, para impedir cualquier forma de comunicación, el aislamiento, la ausencia de sociabilidad y de toda actividad interna, el silencio, la censura de la correspondencia, una hora de visitas al mes con la mampara de vidrio y el «intercomunicador», también la grabación de la visita misma, 10 minutos de llamadas telefónicas al mes con un familiar autorizado obligado a llamar desde dentro de una comisaría de carabinieri. A los reclusos esta prohibido recibir periódicos y libros, la mayor parte de la correspondencia está bloqueada preventivamente a causa de su contenido, además, no es posible comprar periódicos y existe una fuerte limitación en la disponibilidad de objetos dentro de la celda (libros, ropa, comida, papel y bolígrafo contados).

No es la primera vez que se aplica una medida de este tipo a los revolucionarios, en el 2006 cuatro prisioneros de las Brigadas Rojas fueron internados en estas estructuras (una entre ellxs, Diana Blefari, se suicidó en octubre de 2009, poco tiempo después de ser desclasificada del 41 bis). Este es un precedente que, a pesar de las movilizaciones, aún no ha sido desarticulado.

En estas primeras horas de rabia debemos centrarnos en dos cuestiones.

Por un lado, tomamos nota del ataque personal, físico, a un compañero anarquista que en estos diez años nunca ha bajado la cabeza: un compañero que ha reivindicado con la cabeza en alto de haber disparado en las piernas al administrador delegado de Ansaldo Nucleare, el ing. Adinolfi. El hecho de que no hayan conseguido aislar a Alfredo y que no se haya podido silenciar su aporte revolucionario ha sido una espina en el costado para los investigadores. Esto ha llevado en los últimos años a ulteriores medidas restrictivas en su contra, cuales la censura de la correspondencia y la notificación en prisión de una orden de arresto por la operación Sibilla del pasado 11 de noviembre, a través de la cual las fuerzas represivas han intentado hacer desaparer de la circulación un periodico y publicaciones que a lo largo de los años han reportado los artículos y aportes del compañero. A Alfredo debemos hacer sentir la solidaridad de un movimiento que no se deja domar, que no lo ha olvidado, que no lo deja solo; debemos hacer en modo que esta solidaridad rompa las prohibiciones y destruya el aislamiento.

Por otro lado, vemos en este hecho un precedente contra todo el movimiento anarquista. Se necesita una movilización internacional efectiva, que haga pagar al Estado italiano el precio de esta enésima elección. En otras palabras, el precedente no debe pasar.

La lucha revolucionaria, sin embargo, siempre va un paso por delante de la ambigüedad de la ley y trae consigo claridad. Esto esta demostrado por las acciones emprendidas contra el intento de acercamiento al 41 bis, manifestadas en concreto en el 2019 con el traslado de la sección de mujeres AS2 a la prisión de L’Aquila. Ante el manto de aislamiento que el Estado pretende imponer a Alfredo, se necesita reafirmar la solidaridad como una necesidad constante en la comunicación entre revolucionarios, elemento que en estos últimos años no ha faltado a nivel internacional.

Ser anarquista es difícil, pero no nos interesa si esto es considerado un delito o no. Quienes matan de hambre, explota, lanza bombas sobre las poblaciones, son los mismos hombres y mujeres que se ocupan de hacer reentrar al anarquismo en los esquemas del derecho, despotenciando las tensiones, suprimiendo sus posibilidades de acción concreta. Este traslado es también una advertencia para todos aquellos que crean que no existan «libertades» otorgadas por los patrones y gobernantes, un mensaje para quien – uniendo pensamiento y acción- pretende destruir el Estado y el capital.

Necesitamos una movilización capaz de contraatacar. No podemos y no queremos desconocer las responsabilidades políticas y personales de la ministra Marta Cartabia. La jurista, con su disposición, parece haber decidido adelantar de veinte días la sentencia de la casación en el juicio Scripta Manent, previsto para el 25 de mayo, juicio en el cual Alfredo ha sido condenado en apelación a veinte años de reclusión por asociación subversiva con fines de terrorismo y masacre con fines de terrorismo (a los cuales hay que sumar los nueve años y medio del ya citado juicio por la acción contra Adinolfi). En Italia el delito de masacre también se prevé sin muertos ni heridos, en base a la potencialidad de un ataque explosivo. Propio el delito de masacre podría haber sido el pico que ha permitido la disposición del 41 bis contra Alfredo. El mismo delito de masacre se imputa, nuevamente en el juicio Scripta Manent, a la anarquista Anna Beniamino y, en otro juicio, al anarquista Juan Sorroche. Para demostrar cómo el precedente sea ya potencialmente cargado de consecuencias para otros compañeros.

La ministra Cartabia está fuertemente patrocinado como presidente de la república en pectore de aquellas facciones progresistas que han lanzado la campaña para tener finalmente en Italia una jefa de Estado mujer. Recordamos que en Italia el presidente de la república también asume las funciones de máximo jerarca del poder judicial y preside el consejo superior del poder judicial (CSM). No estaremos aquí a quejarnos de los abusos y violaciones del derecho por parte de aquellos burócratas que lo gestionan, pero no podemos no observar cómo la ministra Cartabia haya deliberadamente optado por imponer todo su peso político -de jurista, de ministra, de posible futuro titular del poder judicial- con una disposición que, entre las diversas atrocidades, también contiene aquella de hipotecar la posible condena definitiva para Alfredo y los otros imputados. Por todas estas razones no podemos esperar ni un minuto. Pedimos pues, una movilitacion internacional en el seño de una continuidad revolucionaria que haga siempre mas basto el propio campo de acción.

¡Contra el 41 bis, rompamos el aislamiento!
¡Si intentais taparnos la boca, os mordemos la mano!
¡Contra la censura, perseveremos en la propaganda anarquista!
¡Solidaridad revolucionaria con el anarquista Alfredo Cospito!

Anarquistas

Fuente:
//fuoridallariserva.noblogs.org/post/2022/05/07/contro-il-41-bis-solidarieta-rivoluzionaria-con-lanarchico-alfredo-cospito/?fbclid=IwAR3ZEhY5XaLSPt7dKm8g0Cqa8OZhLnn-jTbVR6O4PqyrfW9KU8mFfvPiu3E