La noche del 17 al 18 de noviembre de 2014, todas las ventanas de la comisaría de policía ubicada en la calle Camille Desmoulins 10 (en el XI distrito de París) fueron reventadas, así como el parabrisas de un camión del servicio de limpieza del ayuntamiento.
A estas alturas que el odio contra los pacos y su sociedad se grita en las calles, expandamos nuestros medios para ir a por ellos de noche y de día, sin necesidad de esperar que nos masifiquemos.
¡Que la violencia cambie de campo!