Es una tarde tranquila, nada de viento, pocos coches, pero de repente algo… un destello, un relámpago en el despejado cielo del pueblo de Voltaggio cae justo sobre dos vehículos caterpillar para la construcción del Terzo Valico [tercer tramo]. Se dejan fuera de uso una excavadora y una apisonadora de asfalto. El relámpago desapareció tal y como apareció, pero parece que con el viento que sopla veremos más. El Terzo Valico es largo, pero vosotros devastadores lo encontraréis aún más largo.
Con Baleno, Sole y Guccio en la mente, sus nombres viven en la lucha contra el TAV.