Junto con palabras de agradecimiento por la concentración del 30 de marzo, desde la prisión de Tolmezzo han llegado algunas informaciónes para difundir.
Nos enteramos de que Massimo Russo, comandante de la escuadra de matones, ha sido trasladado desde la cárcel de Tolmezzo (se dice que a la de Udine).
Se escucha también que la prisión de Tolmezzo –donde ya existen un sector de 41bis y uno de Alta Vigilancia– se convertirá en una estructura utilizada por completo para la Alta Vigilancia con traslados previstos para julio.
Si unimos esta información con los nuevos proyectos de AS (Alta Vigilancia) previstos en Cerdeña y con otras secciones especiales construidas deprisa y corriendo en otras prisiones (como en Ferrara), está claro que el dominio se está preparando para los posibles conflictos fuera y dentro de las cárceles con las armas clásicas del aislamiento y de la diferenciación.
Estos proyectos, así como la presencia de compañerxs en prisión, debe formar parte concreta de las luchas.
Esperar pasivamente, a los enemigos del dominio, sería una mala idea.