Cada día, en París como en otros sitios, el Estado, a través de sus policías, su justicia y su prisiones ataca, encarcela, deporta, controla, vigila, asesina… Todo esto, con el fin de mantener la paz social que garantiza la buena continuación de la explotación y la dominación.
Esta voluntad de control generalizado tiene como objetivo, sobre todo, a lxs pobres y, en algunos barrios, toma la forma de una verdadera ocupación.
Todxs aquellxs que queremos levantar la cabeza y luchar encontrémonos para transformar nuestro asco en acciones, de modo autónomo y sin mediación.
Cada unx de la manera que le parezca más pertinente, que se reapropie de este momento, como de tantos otros.
Concentración el sábado, primero de marzo, a las 15:00 horas en la boca de metro de Belleville.