[Prisiones Bielorrusas] Sobre la tortura sufridas por los 4 compañeros anarquistas

Traducción recibida el 01/01/2022:

Sangre sobre vuestras manos

Hoy, la hermana del anarquista Dmitry Dubovsky, después de visitar a su hermano en prisión, ha publicado un breve relato de la visita y ha hablado de las torturas sufridas por los 4 compañeros anarquistas en los días inmediatamente posteriores a su detención. Los policías cortaron un colgajo de piel del pie de Igor Olynevich, mientras que su hermano Dmitry sufrió un intento de asfixia con una bolsa de plástico y luego lo ataron en la posición llamada «golondrina» (un conocido método brutal de tortura, que causa dolor en los ligamentos y puede dejar consecuencias a largo plazo). Anteriormente, ya se nos había dicho que Sergei Romanov se había cortado las venas en un intento por detener las constantes golpizas a las que lo sometían los agentes de la policía fronteriza.

Sabemos bien que los activistas anarquistas son golpeados repetidamente a manos de la policía, pero a partir de agosto del 2020, con el estallido de las revueltas contra la dictadura de Lukashenko, la policía literalmente ha salido fuera de control y ya no se ponen algún límite. Este sadismo acentuado existía en las llamadas «fuerzas del orden» incluso antes del estallido de las protestas, pero una persona no puede convertirse en un animal de la noche a la mañana y es evidente que las torturas y agresiones a las que son sometidos los presos políticos, han sido experimentadas y utilizas precedentemente también en presos comunes.

La historia de los 4 compañeros anarquistas es solo un ejemplo de aquello que está sucediendo ahora en Bielorrusia. Hay miles de personas encerradas tras las rejas, que no tienen voz, y estamos seguros de que están siendo agredidas y torturadas continuamente, incluso después de haber sido condenadas. La dictadura bielorrusa se ha transformado de un régimen autoritario a una verdadera secta de sádicos, dispuestos a derramar sangre no solo para permanecer en el poder, sino también porque han adquirido el gusto por hacerlo. Si tenéis alguna duda sobre las personas que trabajan en el Ministerio del Interior/KGB, entonces recordar aquellos que luchan desde dentro de las cárceles por su libertad y la nuestra.

No olvidaremos cada gota de sangre derramada en la lucha contra el régimen; por cada lamento y por cada lágrima derramada por nuestros amigos y compañeros, no solo la policía, sino cada hijo de puta que ha ejecutado esta sentencia, lo pagará. Puede que hayáis ganado en el 2020, ¡pero la guerra contra la dictadura continúa!

¡Hasta que todos sean libres!

Fuente:
pramen.io / Traducción al italiano: infiernourbano