Traducción recibida el 10/05/2024:
REFLEXIÓN SOBRE EL CONTEXTO GENERAL DE LAS CAUSAS DE LA LUCHA. SOBRE MIS CONDENAS Y ACUSACIONES EN EL JUICIO Y EL NEXO ENTRE LAS PRÁCTICAS DE ACCIÓN DE LUCHA REVOLUCIONARIA NO SISTÉMICA Y «MI» SIGNIFICADO DE LA VISIÓN ANARQUISTA
«(…) La realidad es precisamente esta cosa compleja que no puede reducirse a las conclusiones de un proceso judicial. Este siempre será arbitrario y se basará no en la evidencia sino en la fuerza, no en la lógica sino en la dominación. ¿Un razonamiento difícil? Tal vez sí, pero un razonamiento que una vez hecho nunca se olvida».
[Publicado con el título Noterelle su Sacco e Vanzetti. al margen de una conferencia de estudio, en»Anarchismo» no 63, julio de 1989, pp. 36/40].
Alfredo Maria Bonanno, A mano armata, Pensiero e azione, Ediciones Anarquismo.
En recuerdo, y un saludo querido y ¡hasta pronto compañero Alfredo!
Hola a todxs, compañerxs
Soy Juan Sorroche, preso anarquista detenido el 22 de mayo de 2019, y escribo desde la sección AS2 de la cárcel de Terni, donde estoy recluido desde hace cinco años.
Después de mi dura condena el 26 de enero de 2024 en Roma en el juicio de la Corte de Casación por mi acción contra la Lega Nord, un partido que formaba y forma parte del gobierno del estado italiano, un partido fuertemente racista, misógino y xenófobo.
Como preso anarquista me gustaría aclarar a los compañeros, revolucionarios, marginados y oprimidos el nexo de las causas de la lucha por la que estoy hoy aquí en la cárcel como preso anarquista.
En primera instancia, incluso habiendo retirado el fiscal el cargo de «masacre política» (285), fui condenado a 28 años de prisión más tres años de libertad condicional. En apelación, habiéndola reducido casi a la mitad, me condenaron a 14 años y 7 meses. Hace unos días, el Tribunal de Casación me condenó definitivamente a 14 años y 7 meses, una pena significativa y ejemplar por el atentado.
En primer lugar, quiero decir que entré en prisión habiendo acumulado ya unos 8 años por mis luchas en Italia, motivo por el cual me escapé en 2016 para seguir viviendo y luchando. De estos 8 años, 4 años son por el «juicio NO TAV» ya definitivo. A partir de entonces los otros cuatro años son varios procesos relacionados con luchas anti-prisión y anti-CPR, anti-fascistas y anti-democráticas, luchas contra la tecnología, los OGMs, ‘ecologistas’, en las que participé siempre intentando incluir el aspecto anti-estatal y anti-capitalista del anarquismo en Trentino como en varias situaciones italianas. Esto también incluyó el Valle de Susa, una ruta que había tomado en años pasados en la lucha NO TAV contra uno de los proyectos del capital y el estado y el tentáculo devastador del tren de alta velocidad. Fui detenido entre muchos por las jornadas de lucha y enfrentamientos violentos del 3 de julio de 2011. En el juicio y durante mi encarcelamiento de entonces, reivindiqué con una declaración personal aquellas jornadas de lucha y los caminos de oposición al TAV y más en general el aspecto antiestatal y anticapitalista. Rechacé en el proceso NOTAV la defensa, posicionándome antijurídicamente al intentar luchar rechazando el juicio, creyendo que no tenía que ‘defenderme’ en aquel teatro judicial, y por ello fui condenado a 4 años y 6 meses. Y me asumo esas decisiones con la cabeza bien alta.
En mayo de 2019, tras dos años y medio de fuga, fui detenido junto a otro compañero acusado, junto a otra compañera, de complicidad en mi fuga, y luego él fue condenado por complicidad a un año y medio, una sentencia tan significativa y ejemplar como ninguna vista en años, y que nos avisó del nuevo tenor de los juicios por venir.
Cuando me detuvieron, fui conociendo poco a poco una serie de investigaciones y juicios en los que se me acusaba de varios atentados (con finalidad terrorista) en Italia:
– los artefactos en la sede de la Lega Nord de Treviso por el atentado del 12/08/2018, en relación a los dos artefactos explosivos, uno estallado y otro lleno de clavos descubierto por los artificieros en forma de trampa para actualizar a los miembros del edificio y a las fuerzas del orden; estos fueron colocados en la sede de la Lega Nord de Treviso y reivindicados asi: «vamos a golpearlos en casa!!!!: (…) para atacar específicamente el racismo y la explotación. Golpear al Estado, al capital y a sus perpetradores. La acción directa deja claro porqué y cómo.
¡Por la solidaridad internacionalista, rebelde y anarquista!
Solidaridad con todos los presos (…). ¡Y a todos los rebeldes en las cárceles del mundo!
Celda Haris Hatzimihelakis/Internacional Negra 1881/2018′.
– la bomba en el Tribunal de Vigilancia de Trento 2014. Condenado en primer grado de juicio a 3 años y 2 meses, luego absuelto en el segundo grado, pronto iré a la Corte de Casación. Reivindicado anónimamente: en solidaridad y para dar voz a los presos que luchan dignamente en todas las cárceles y a los compañeros anarquistas que estaban aislados en la AS2 en Italia y a otros presos anarquistas de todo el mundo.
– el dispositivo contra la POL GAI (escuela de policia) reivindicado por la celda H, cito algunos esbozos de la reivindicacion publicada:
«(…) como célula H (C.A.A.) afínes a la Internacional Negra y nos sumamos a la llamada a la acción para un DICIEMBRE NEGRO.
Atacamos uno de los brazos armados del estado. Policías de toda Italia y de otros estados se forman en esta «escuela». Esta es una pequeña señal contra la guerra.
Nos solidarizamos con todas las personas que luchan contra todos los estados y el capital.
Nuestros pensamientos están con los muchos compañeros reprimidos, encarcelados, torturados o asesinados en el presente y en el pasado. En solidaridad con todos los presos que luchan».
Esto en el contexto de la campaña lanzada por los presos anarquistas en Grecia por un Diciembre Negro, una llamada internacional al anarquismo de acción en 2015.
Un juicio que iniciaré en breve.
Hasta hoy he acumulado 23 años de cárcel.
Acciones que comparto ya que para mi forman parte de la historia de nuestro movimiento de lucha en el anarquismo de acción revolucionario no sistémico y la lucha por la libertad de todos los oprimidos del mundo. Más allá de mi responsabilidad o no en estos hechos. Y estoy decidido a avanzar en mi ser anarquista para vivir-luchar dentro de mis limitadas posibilidades como preso.
-Causas generales de la lucha y la conexión de las prácticas de las acciones de lucha revolucionaria no sistémica-.
«(…) nuestra ética no tiene nada que ver con la moral de esta sociedad fundada sobre la dominación. Pero no podemos dejar que nuestros enemigos hablen de nosotros y así, de hecho, hablen por nosotros. Más bien impedir, quebrar, subvertir la narrativa del poder, esforzándonos para volcarla en un discurso nuestro, que nunca pierda de vista lo que nos importa de verdad». La solidaridad y su fantasma, «I giorni e le notti»
«Es siempre el presente el que tiene una mirada transformadora sobre el pasado. El pasado no está inmóvil en una caja fuerte, siempre está ahí para las nuevas generaciones, y esto lo dijo un grandísimo intelectual judío que fue Walter Benjamin, son las luchas del presente las que reactivan las chispas de esperanza del pasado, porque el pasado, en sus intentos de emancipación, de igualdad, de utopía, ha quedado inacabado, pero ese inacabado no está enterrado para siempre, puede reactivarse hoy. (…)».
El pasado inacabado y el coraje necesario (de un discurso en una plaza de Trento en febrero de 2024 en solidaridad con el pueblo de Palestina) Considero necesario posicionarme y aclarar el significado de las causas de la lucha en el anarquismo y que me han traído aquí a la cárcel para intentar volcar la descripción de las autoridades y convertirla en nuestro propio discurso de lucha, dadas las muchas veces que ha sido interpretado y falseado por el poder estatal con tantos roles dogmáticos a los que me he visto forzado y encuadrado forzando y encuadrando roles, jerarquías e ideologías nunca asumidas. Como lo es compartir las prácticas de acción de lucha revolucionaria por las que hoy se me sigue acusando y por las que ya he sido condenado a una pena ejemplar.
No me arrepiento de ser anarquista individualista, al contrario, me siento orgulloso. Y que, repito, sea o no responsable de estos hechos, sigo compartiendo las acciones de la lucha anarquista contra el capital y todos los estados racistas, imperialistas y colonialistas como Italia, o España donde nací. Haré un discurso sobre las causas generales de «mi» lucha en el anarquismo en Italia. Una lucha que es también por la libertad de todos los oprimidos, de la que formo parte. Porque el anarquismo de acción y el anarquismo de planificación insurreccional es el movimiento-galaxia en el que estoy desde hace 25 años. En el anarquismo de acción tenemos, nos guste o no, «políticamente»-socialmente nuestros propios espacios, tiempos y métodos creados a lo largo de años y años con nuestra lucha, lucha de 150 años de historia anarquista, así como sus diferentes perspectivas. Siempre he sido cuidadoso, «estudié» como autodidacta, sólo en la cárcel a la edad de 46 años me saqué el diploma de escuela secundaria, y debo decir que desde que empecé a leer, hace veinte años, con el tiempo me di cuenta de que lo hice, al principio, instintivamente, como una herramienta de concienciación del hombre en revuelta; es decir, cuánta importancia tienen en el anarquismo como herramienta las teorías, los libros, nuestros periódicos, como instrumentos de relación y conocimiento experimental que acompaña a la perspectiva para saber cómo dirigir la acción.
Creo que es fundamental comprender las metodologías de las experiencias pasadas en el anarquismo y las experiencias o luchas revolucionarias de todos los tiempos contra todas las formas de autoridad.
Y así, aparte de mi curiosidad natural por todas las cosas del universo, siempre trato de ser sagaz para conectar las raíces fundamentales de nuestras luchas pasadas en el anarquismo. Que siempre, hay que decirlo, ha sido lucha entre los parias de los parias; el lumpen obrero y esa es para mí la esencia del anarquismo revolucionario no sistémico y herético. Creo que la revuelta y las metodologías revolucionarias del pasado son imprescindibles conocerlas, como nuestras raíces, para crecer y desarrollarnos en la praxis hoy, en el presente, para intentar evolucionarlas continuamente a mejor así como para volver a intentarlo con nuestras posibilidades en el anarquismo libertario, una lucha que es, siempre, contra todo opresor autoritario.
El Estado y la represión muchas veces nos señalan directamente, cuando nos condenan ejemplarmente, indicándonos que esas acciones y en general las acciones de ataque con sus causas de lucha quedan cualitativamente embotadas si no van acompañadas de una proyección y perspectivas libertarias en la lucha codo a codo con los explotados y las consiguientes fuerzas reales que hay que crear.
Pero que no siempre es luchar codo con codo con los explotados en el sentido tradicional, es decir, en el mismo espacio-tiempo, no es sólo agruparse homogeneizándose en un solo frente, sino también saber crear la lucha nosotros mismos con nuestro propio espacio-tiempo, y en nuestro propio espacio-tiempo, y también saber respetar otros espacios-tiempos en sus diferentes diversidades de oprimidos luchando contra todo autoritarismo.
De lo que tenemos que ser conscientes, de las diferentes luchas, es que ya están intrínsecamente conectadas con las diferentes luchas antiautoritarias, están interconectadas con nuestras necesidades comunes de oprimidos, de marginados, y tenemos que aprender a mirarlas con otras lentes, que no son las mismas que las de esta civilización. Una visión de clara conciencia porque la interconexión está en la naturaleza misma de ser oprimidos y marginados.
Pero cuidado, no olvido mis contradicciones e imperfecciones. No olvidemos nuestras contradicciones ligadas a nuestros privilegios como heterosexuales occidentales, blancos, hombres cis: la heterosexualidad no es una falta en sí misma, pero sí lo es cuando es la única vía impuesta por la educación estatal desde la infancia que nos impone esta vía unidireccional sin dejarnos libre elección. Todo ello impuesto por la estructura familiar, patriarcal y cristiana aquí en occidente. Y creo que es el primer anillo de la cadena de privilegios y opresiones, la base que sostiene la civilización jerárquica-estatal en Occidente.
Así como no debemos olvidar nuestras diferentes y diversas opresiones, de género, racialización, lugar de nacimiento y consecuente clase social. Y prestemos mucha atención en la economía capitalista al trabajo esclavo no asalariado inherente y al autoritarismo en la familia impuesto durante siglos a las mujeres uotros individuos no alineados con los estándares de la sociedad. Estos últimos, generalmente mujeres, más aún si son inmigrantes, lesbianas, trans, así como homosexuales, etc. etc.
Estos deberían ser observados, aceptados, confrontados y tratados como tales en nuestras diversasopresiones y privilegios. Digo deberían porque es una autocrítica, a la poca atención y cuidado que he prestado y presto a esto.
Por lo tanto, urge saber crear la no dualidad de la lucha, que es saber crear desde uno mismo la lucha intrínsecamente al cuidado solidario de la sensibilidad, que es coraje y otro tipo de paradigma de concebir la lucha y la sensibilidad y la fuerza.
Es lo que yo llamo conceptualmente:
Mis dos pilares fundamentales del anarquismo que son los dos dragones de la anarquía.
Que es una imagen figurada para simplificar e intentar comunicar y explicar conceptos muy complejos de la lucha y que son para mí el dentro-fuera de la individualidad con el dentro-fuera de lo colectivo en la lucha anarquista.
– El primer dragón tiene dos caras y es como el yin con el yang.
El yin es la destrucción fundamental de esta columna vertebral que son nuestros privilegios, arraigados en nosotros, diferentes y diversos.
El yang es el aspecto creativo y debe ir acompañado de la creación continua de nosotros mismos con la autoeducación que es el desarrollo del Yo-individual acompañándolo al Ser anárquico como apertura al cosmos-visión al otro, y a todo lo que nos rodea en general; nosotros, como individualidad, somos parte inseparable de ello. Entonces es consciencia clara, es tensión hacia la liberación todo el tiempo. Es una revolución interna del ser, y para mí personalmente es la liberación como práctica de autoeducación místico-espiritual continua.
– El otro dragón es el organizarse individual y colectivamente para el ataque externo a la estructura sistémica y opresiva y que produce las diferentes morales sociales y materiales como organización social y destrucción de esta civilización autoritaria y así la consecuente lucha para organizarse para el ataque a todo poder jerárquico y autoritario.
Estos dos dragones generales son al mismo tiempo yin-yang y deben caminar siempre de la mano con su camino de conjunto orgánico con la perspectiva de la liberación total.
Creo que este camino con los dos dragones es un camino constante en toda nuestra vida de relaciones del conjunto y debe equilibrarse y reequilibrarse constantemente. Es una perspectiva articulada y orgánica, por lo que si aislamos o eliminamos una parte de ella, esta parte está destinada a marchitarse porque vive una vida alienada y una vida ilusoria, ya que no recibe savia del resto de la planta, es decir, de todos estos otros factores fundamentales del vivir-luchar.
Y por eso he observado a menudo que, en la represión estatal, el Estado quiere descaradamente borrar el contexto social y «político», cortar la savia y naturalizar en los oprimidos que luchan el aislamiento y la fragmentación alienándonos. Despolitizarnos, desnaturalizarnos del contexto social natural de las acciones, luchas y trayectos de los compañeros alienándonos de nuestros propios contextos y desconectándonos así conceptualmente también de las luchas de los oprimidos de las que formamos parte natural.
Y que es justo no olvidar que estas acciones no son palabrería sino expresiones concretas de prácticas de solidaridad anarquista para todos los oprimidos, los últimos.
El Estado es consciente de que siempre ha existido esta posibilidad incontrolable de contagio. Por lo tanto, ataca reprimiendo a los rebeldes y revolucionarios para prevenir y minimizar esas posibilidades incontrolables.
Sabiendo, el Estado, que en Italia hoy no hay fuerzas revolucionarias materiales reales contra un Estado infinitamente más poderoso. Pero sabe que los objetivos, nuestros objetivos, son correctos ideológicamente, porque intentan crear esta posibilidad incontrolable contagiosa. Pero las posibilidades incontrolables deben crearse atacando y combatiendo en la práctica a la raíz la violencia sistémica que desde hace siglos y siglos ejercen los Estados racista-colonialistas y capitalistas.
De hecho, la dirección es la correcta.
Pero también debemos ser fieles a nosotros mismos, y conscientes de que la voluntad, las pasiones sentidas, las ideologías utópicas son necesarias y fundamentales. Pero son fundamentales, y faltan, las creaciones metodológicas y materiales, las preparaciones de la praxis de las fuerzas reales objetivas y cualitativas, como minoría anarquista revolucionaria, para poder dar impulso a las luchas libertarias, para ser conscientes de que estos diferentes aspectos son inseparables unos de otros. Y esta es la necesidad de entrelazar el conjunto de prácticas de lucha, panfletos, periódicos, ocupaciones, guerrillas urbanas y partisanas, así como seguir perfeccionando el análisis y las capacidades materiales. Así es como debemos una y otra vez luchar y luchar para que la desproporción se invierta mediante la gimnasia revolucionaria.
Además, la propaganda de la praxis muestra y avisa y alerta, nos dice a todos los oprimidos que el momento de actuar es ahora. Y que la tarea de toda individualidad es luchar y luchar para erradicar precisamente lo que hoy tenemos ante nuestros ojos; las masacres, los genocidios de los oprimidos a manos del capitalismo y de todo Estado racista e imperialista y colonialista por naturaleza.
Por eso hoy la solidaridad no puede sino dirigirse a la resistencia de los oprimidos palestinos que llevan 75 años resistiendo al colonialismo occidental con guerrillas armadas.
Porque desde el 7 de octubre hasta hoy, 30.000 personas han sido asesinadas bajo las bombas en Palestina, la mayoría civiles, muchos y muchas niños masacrados. Por no hablar del genocidio llevado a cabo por el Estado israelí-sionista desde hace 75 años. Con la complicidad del colonialismo capitalista de EEUU y de estados de Europa Occidental como Italia. Esto es el racismo sistémico de Estado.
Así como las continuas matanzas sistémicas inherentemente naturalizadas a nuestros ojos como vemos todos los días en el Mediterráneo son racismo sistémico de Estado. O en Libia con los grandes campos de concentración, como por ejemplo en la isla de Lesbos en Grecia, o en Italia, Francia, Inglaterra, España, y esto es para la explotación capitalista esclavista de la mano de obra inmigrante en el campo como en todas las ciudades de Occidente y en todo el mundo capitalista globalizado.
Son los mismos diversos cuerpos militares que me detuvieron, que me tienen prisionero, y que sirven para consolidar este Estado-racista para mantener inalterable su poder de explotadores. Quieren borrar de un plumazo los altísimos niveles de racismo social que existían cuando se llevaron a cabo aquellas acciones revolucionarias, como vemos hoy en Italia y en todo el mundo, y que todos los Estados y el capitalismo han estado fomentando durante décadas. Tal y como ocurre hoy en toda la sociedad italiana haciéndolo pasar por algo carente de violencia, una simple opinión… los Estados y el capitalismo siempre han querido pasar por alto estas cuestiones fundamentales y fomentar la fragmentación, el aislamiento, la alienación con la herramienta tan útil de la guerra y el racismo que es la lucha entre nosotros los pobres y oprimidos: divide y vencerás.
Todo esto los occidentales tendremos que estudiarlo, conocerlo, porque somos cómplices del occidente con sus movimientos coloniales europeos, portadores de la inspiración del concepto de exterminio y eliminación de los indígenas en el mundo, mis antepasados españoles, donde nací, algo saben de ello, y debemos avergonzarnos de lo que es el Estado español. Por eso debemos utilizar los privilegios que hemos adquirido con el genocidio y la sangre de los indígenas exterminados durante siglos para intentar luchar y luchar contra nuestros Estados occidentales, con fuerza, contra las ideologías racistas, hijas de todos los Estados y del capitalismo, del imperialismo y de todos nuestros movimientos coloniales que tienen profundas raíces en la Europa occidental y estatal.
Por eso ayer como hoy debemos luchar contra la limpieza étnica de los oprimidos en Palestina luchando contra nuestros Estados occidentales, así luchamos contra el Estado colonialista de Israel que tiene como ideología el sionismo, que es intrínsecamente racista.
Y entonces:
«No podemos hablar hoy de lo que está ocurriendo en Israel y Palestina sin hablar del sionismo, y de hecho no es casualidad que Israel y sus partidarios hayan invertido tantos esfuerzos, en este como en otros países, para equiparar antisionismo y antisemitismo, y así seréis silenciados. Sin embargo, ésta es la única forma correcta de representar esta historia».
Pero cuidado, porque esta historia es también historia de la lucha y la resistencia de los palestinos oprimidos, y debe ser sobre todo nuestra, la de los marginados que luchan en todo el mundo.
«Por eso hay que ir a las raíces de las violencias que surgen de ideologías precisas, ideologías racistas, y que surgen de los Estados nacionales occidentales, del capitalismo, del que surge también la ideología sionista, en cuya base está la eliminación de los autóctonos».
Aquí está el nexo, el núcleo, las causas de la lucha por la que hoy estoy aquí en la cárcel.
La lucha por la destrucción de todo Estado, del capitalismo, con sus consecuentes guerras, genocidios, racismos, sexismos, patriarcados, apartheid, toda prisión, toda jaula y frontera así como toda jerarquía y autoritarismo de todo color y tipo. En otras palabras, por la Anarquía.
El nexo específico de prisionero anarquista para tratar de contribuir y formular análisis y metodologías en lucha con la relación de las causas de la lucha general.
«Hasta el día de hoy, la guerra contra el enemigo interno se ha superpuesto irremediablemente a la guerra contra el enemigo externo, en un único movimiento de acumulación de dominio político, económico y cultural que va principalmente en detrimento de poblaciones y opositores.
En este marco, la fusión de la justicia antimafia y antiterrorista (2015) ha generado una máquina todopoderosa que se alimenta de sí misma con cada vez más investigaciones y medios a su disposición para vigilar a cada vez más personas o hacer creer que lo hacen, con el objetivo de instalar el miedo y crear un vacío en torno a los más directamente afectados.
Contra toda distinción entre culpables e inocentes, que es pura arbitrariedad de la inquisición democrática, apoyar los motivos de la revuelta y las identidades atacadas es una cuestión de autodefensa colectiva. Los instrumentos represivos, cada vez más duros, que se utilizan contra ciertas categorías de personas están destinados a ampliarse. La extensión del régimen del 41 bis, la reciente historia del instrumento represivo del 270 (asociación subversiva), la inculpación de Zac por 270 quinquies (autoformación), el paquete de seguridad, el decreto Caivano, la extensión de la vigilancia y el encarcelamiento a todos los niveles, son ejemplos de ello. En esta estela, los sindicatos autoorganizados son acusados de conspiración criminal, la lucha de los parados organizados se convierte en extorsión, los enfrentamientos callejeros son castigados con el agravante camorrista, las publicaciones o pancartas son censuradas con la acusación de incitación al crimen o apología del terrorismo. Incluso la extención de medidas preventivas y el dispositivo de «vigilancia especial» -históricamente utilizado para castigar a pobres, bandoleros y antifascistas- es una de las muchas consecuencias de la fusión de los aparatos antimafia y antiterrorista y de la necesidad de equiparar el armamento de guerra contra el crimen organizado (mediático, jurídico, lingüístico) contra los disidentes […].
Este sistema es históricamente expresión de una arraigada cultura de la sospecha y de la tendencia, desde la colonización del sur de Italia, a convertir la cuestión social, los ideales y las luchas en problemas jurídico-penales».
Nápoles, de un texto publicado durante la huelga general del 23 de febrero –
– Vigilancia social y vigilancia especial –
Y así, como analizaron perfectamente más arriba los compañeros napolitanos, creo que es el caso de mi sentencia específica para la Liga Norte. Y también lo es el «nuevo» juicio al que estoy a punto de sufrir por el 280 (atentado terrorista) en Brescia.
Así que estos juicios y condenas no sólo vienen a afectarnos como individuos concretos por derecho propio, sino sobre todo como dinámicas táctico-estratégicas del Estado italiano cómplice de las guerras coloniales en general y específicamente de la de Israel en este momento de la historia con el patrullaje estratégico del buque de guerra en el Mar Rojo y la enorme venta de armas a Israel para defenderlo así como la complicidad en la represión y encarcelamiento por orden de Israel en Italia de 3 palestinos con el uso de la 270. Uno de ellos encerrado en esta sección de AS2 en Terni. A ellos va toda mi solidaridad. Y aqui caen estos instrumentos de represion general con las ordenes no tan veladas de la poderosa maquina de la Direccion Antiterrorista Antimafia del Distrito Nacional con sentencias ejemplares en este momento historico al enemigo interior.
Y en specfico por los artefactos en la sede de la Liga Norte en Treviso.
Con una desproporcion del castigo entre los hechos y el delito, una sentencia que no tiene precedentes en las ultimas decadas de historia del movimiento anarquista, con el aumento de la represion y las interpretaciones cambiantes de las leyes existentes. Como con la ley de «matanza política». Así como por primera vez ha pasado la masacre en la condena de Anna Beniamino y Alfredo Cospito, compañeros anarquistas. A quienes va toda mi solidaridad y estima. Desproporción es decirlo suavemente.
Y tambien es asi por el nuevo juicio del artefacto contra la POL GAI (escuela de policia) con la dirección y las ordenes de la no tan velada D.D.N.A. detras de la judicatura Bresciana. Juicio que comenzará en breve.
Sin embargo, no me gustaría centrarme sólo en el nivel de los análisis técnicos procesales, lo harán si quieren otros compañeros y mejor que yo, o de la represión como mala suerte. En cambio, me gustaría resaltar el contexto de lucha de esta acción específicamente al POL GAI de la que me acusan. Independientemente de mi responsabilidad o no en tales hechos.
Contexto de esta acción, que sin embargo es un método utilizado en el anarquismo desde hace mucho tiempo y que en este caso concreto fue la campaña Diciembre Negro lanzada por presos anarquistas en Grecia y con una respuesta internacionalista en todo el mundo del anarquismo de acción en 2015.
Y lo que me gustaría recordar que tenía:
“Como hilo conductor de anarquía y acción directa y había podido unir a compañeros de Grecia, Italia, Colombia, España, Suiza, Holanda, Reino Unido, Alemania, México, Chile, Argentina, Bolivia, Brasil, Canadá, Estados Unidos, Uruguay, Australia, Perú, Ecuador y Bélgica a través de muchas acciones multifacéticas. Textos de camaradas detenidos, acciones de contrainformación y propaganda, pancartas en las alas de las prisiones, marchas militantes y enfrentamientos con la policía, incendios, bombas y vandalismo contra objetivos enemigos, iniciativas en okupas y centros sociales, publicaciones de obras anarquistas que describen acciones insurreccionales y experiencias de acción directa, manuales y análisis teóricos de diferentes visiones, todos han contribuido a su manera a un frente polimorfo de lucha informal organizada que internacionaliza las experiencias y va al ataque». Nikos Romanos, Ataco, luego existo
Y este es, de hecho, el contexto real que fue una contribución del anarquismo de acción vivaz y cualitativo. Más allá de lo que diga y diga el poder judicial de Brescia, que sólo quiere descontextualizar y despolitizar este conjunto de acciones de lucha legales e ilegales y que no tienen ninguna importancia jerárquica para quienes contribuyeron a la convocatoria del Diciembre Negro y que la acción al POL GAI de Brescia tampoco forma parte de eso. Esto es.
Así como quieren descontextualizar y despolitizar mi anarquismo dadas las muchas veces que los poderes judiciales han interpretado y falsificado en las distintas investigaciones y despachos judiciales, como la «nueva» investigación y el proceso de Brescia, con los numerosos roles dogmáticos que han colocado sobre mí, porque, en primer lugar, no soy un anarcoinsurreccionista, como continuamente repiten como loros, y rechazo esta figura y este concepto porque lo imponen los diferentes fiscales en diferentes procesos como parte de una categoría que debe generalizarse y unificarse a voluntad para dirigir mejor las investigaciones del poder judicial y de la D.D.N.A.A. Soy un anarquista individualista y ciertamente no serán los fiscales los que me cataloguen con una etiqueta estigmatizada para su propio beneficio. Y así, hicieron lo mismo e interpretaron a su antojo sobre los diferentes números de la aperiódica “Beznachalie” que tomaron como evidencia, hacen lo mismo continuamente, interpretando y distorsionando los textos.
Entre otras cosas, una publicación pública aperiódica, y no clandestina, ocultista o turbia, como quieren hacer pasar para crear un ambiente de sospecha, y que entre otras cosas siempre he reivindicado con orgullo como parte de mis ideas y como medio de libre propaganda y autoproducido. Y como escribí públicamente en el aperiódico n.9, compartiendo frontalmente el método y la campaña del Diciembre Negro de 2016.
Una convocatoria que sigue siendo hoy un método-herramienta válido, un método cualitativo, y que forma parte de todo el movimiento anarquista de acción.
Es precisamente un método de articulación de todos aquellos que lo comparten en el movimiento anarquista. No es una etiqueta ni una sigla, como quieren hacer pasar el poder judicial y la D.D.N.A.A. acusandome de roles y jerarquías dogmaticos que nunca comparti’.
Estas reflexiones parten siempre de la autocrítica. Con esto quiero exponer de forma clara y firme lo que pienso y de lo que estoy convencido, pero sinceramente no me interesa exponer necesariamente mis propios motivos.
Pero creo que al iniciar discusiones, propuestas y convocatorias, ya sean específicas o generales, y que tendrian que conducir a acciones multifacéticas, se trata de discusiones, propuestas y convocatorias que son animadas, y es importante discutirlos entre compañeros. Por lo tanto debemos recordarnos que todos los camaradas que se reconocen están del mismo lado, por lo tanto no son enemigos; si no, ¿Qué sentido tiene discutir o hacer cosas juntos? Yo creo que cuando se decida hacer discusiones, propuestas y convocatorias sería muy apropiado y recomendable decirnos claramente qué queremos obtener de estas discusiones, propuestas y convocatorias, y las razones por las que estamos asumiendo el articulación informalmente en el anarquismo de acción. Así como también creo que para iniciar discusiones y propuestas lo mejor sería tener claridad en la perspectiva, lo que significa simplemente pensar antes en los diferentes problemas que podemos encontrar, o en muchas otras cosas que podrían ser útiles, o en qué y qué acciones no estamos de acuerdo. O porque: «si los camaradas tuvieran que ser defendidos sólo dentro de los límites del movimiento anarquista internacional basando la propaganda sólo en las motivaciones de los anarquistas y aceptando exclusivamente aquellas fuerzas extranjeras que se declararan dispuestas a permanecer dentro de los límites de esas motivaciones» (AMB)
Creo que esto debería hacerse primero con lógica y se evitarían muchos otros problemas superfluos. Ademas creo que, aparte de lo que subraya A.M.B, que para mí puede estar bien en general, para los compañeros anarquistas y en particular si no estás de acuerdo sobre las acciones o el objetivo de las acciones que llevaron a los compañeros a prisión. Sin embargo, si compartimos políticamente las luchas y acciones de las que se les acusa, creo que debemos recordar las causas por las que los compañeros están presos; por supuesto si uno está de acuerdo. Además, creo que somos los anarquistas los que debemos tener firme nuestra brújula y nuestros planes de praxis anarquista y el timón recto de acción directa y ruptura contra toda autoridad y no dejarnos llevar por las diferentes olas. Teniendo esto claro, es obvio que los reformistas serán reformistas y el mundo de la prensa y el espectáculo harán un vulgar espectáculo sensacionalista y probablemente nos oscurecerán espectacularmente, incluso cuando estemos en todos las televisiónes del mundo; eso es espectáculo, ficción, ilusión. Pero ¿deberíamos los anarquistas estar interesados en esto? No si somos claros y seguimos con nuestro proyecto anarquista y revolucionario, porque las fuerzas reales son otras. De lo contrario, ¿cómo podemos pensar que estamos en una revuelta extendida o en una insurrección y revolución? Y por tanto sería oportuno interrogarnos y cuestionarnos sobre estas propuestas, pero primero entre compañeros: “si los anarquistas hacen todo lo posible para ampliar su propaganda, involucrar a la gente, hacerse escuchar por el mayor número posible de personas, ¿cómo pueden entonces, cuando se presente la oportunidad, no aceptar la colaboración de fuerzas políticas e intelectuales que saben muy bien donde quieren ir? ¿Cómo salir del dilema? De manera sencilla, partiendo siempre de la tesis de que para nosotros el hecho técnico es secundario, y que si los compañeros son acusados, encarcelados y en determinadas ocasiones, incluso ejecutados, eso sólo sucede porque son anarquistas, independientemente del hecho objetivo que constituye un elemento de debate procesal pero que a nosotros como revolucionarios sólo nos interesa marginalmente. Nunca podemos perder este punto como elemento central de la campaña de defensa política» (A.M.B).
Además, al mismo tiempo, debemos tener nuestra autonomía en el anarquismo para no subordinar nuestras percepciones a una estructuración centralizada. Asumiendo las propuestas y convocatorias, como método y por tanto también como espacio-tiempo, así damos apoyo a todo lo que es el desarrollo de iniciativas individuales y de diferentes colectivos y grupos, para que la creatividad individual y colectiva de los camaradas pueden crecer de una manera inventiva e informal. Siendo así, no nos estamos sometido a ninguna voluntad de una tendencia política. Y tratar de crear bases, como compañeros, con una sana convivencia entre las diversidades del anarquismo de acción y tratar de tener una comprensión más profunda de las diferentes perspectivas del anarquismo. Haciendo un esfuerzo y reconociendo el aporte sincero de todas las diferentes visiones de lucha. Este para mí debería ser el objetivo.
A los compañeros digo que es un método de articulación que tiene la intención de crear relaciones de lucha para saber reproducir herramientas metodológicas adecuadas y acompañar constante y asiduamente las luchas. Y no abandonéis caminos y situaciones a las que se prometen a parablas inmensas venganzas, y digo palabras por experiencia porque luego esas promesas, venganzas y caminos casi todos caen en oídos sordos después del momento de excitación momentanea, y cuando pasa un determinado período, lamentablemente, llegan otras promesas y llamadas de «moda» y entusiasmo temporal. Y el camino anterior cae en el más absoluto silencio con sus promesas y venganzas. Y ojo, porque estoy haciendo una autocrítica. Para luego seguir continuamente, aquí y allá, las luchas en el momento de emergencia, sin una continuidad real.
Creo que sería suficiente la previsión de incluir las que han comenzado y conectarlas con un hilo a las causas generales de la lucha y a las luchas de necesidad que llegan nuevas en este momento, para evitar un desperdicio de energía y también por perspectiva y continuidad. Como sucede por ejemplo con el silencio ensordecedor que existe desde hace unos meses sobre el camino y la cuestión de la baja de Alfredo del 41bis, contra el 41bis y la abolición de la cadena perpetua, porque hay otra nueva emergencia. Y ojo, no digo que no deban seguirse estas nuevas emergencias, o que no esté bien comprometernos, al contrario. Sin embargo… creo que deberíamos buscar cuidadosamente herramientas metodológicas adecuadas, como los métodos utilizados en las luchas antes mencionadas, para asegurar que estas características puedan emerger cuando decidamos en todas las campañas de acción autónoma. Y estaría bien que ya no se basara en las emergencias de las huelgas de hambre de los presos sino en las luchas y cuestiones que nacieron y decidieron colectivamente utilizar esos métodos. De esta manera habría la oportunidad de desarrollarlos siguiendo nuestros propios ritmos y no los de la emergencia y por tanto de las circunstancias y el ritmo que nos da el Estado, y así intentar intensificar el conflicto con un hilo conductor y una perspectiva.
Para mí, esto significa intentar en la práctica lanzar perspectivas de acción que sean concretamente abiertas y multifacéticas para todos los anarquistas de acción y los oprimidos que quieran luchar, para intentar articularse y organizarse informalmente con otros anarquistas y no anarquistas.
Creo que dejando el espacio abierto a acciones multifacéticas y a todas aquellas diferentes individualidades anarquistas que deben evitar que se conviertan en «propiedad privada» de alguna tendencia anarquista específica, o en una práctica anarquista específica exclusiva de tal o cual tendencia. En lugar de esto, se convierten en metodologías y herramientas para todos los camaradas que quieran transformar el anarquismo de acción en un verdadero contraste contra el sistema.
Y estos métodos se utilizaron en la huelga de Alfredo. Para L’Aquila, para cerrar la sección de AS2 o para la convocatoria del Diciembre Negro, esta herramienta metodológica fue de hecho una conexión de comunicación entre diferentes prácticas anarquistas locales e internacionalistas. Esto es lo que tendriamos que analizar y saber reutilizar… todas las prácticas: analizar-probar-saber-reutilizar dadas sus cualidades y utilidad. Y, además, también se ha sabido extenderlo a componentes no anarquistas. Y esto desde mi punto de vista es positivo.
Entonces para mí es querer crear estas herramientas relacionales metodológicas. Y en la práctica, en estas luchas mencionadas hubo, en cada una de ellas de manera diferente, la coexistencia creativa de camaradas de diferentes orígenes y concepciones ideológicas y, por tanto, de hecho, la superación dialéctica entre tendencias. Como superar el atasco de la sola teoría y la conjestion esclerótica de perseguir constantemente la emergencia. Sin embargo, camaradas, debemos intentar superar y crear dinámicas diferentes e inversas a la «cultura» y el entorno que existe en el anarquismo, como por ejemplo el arraigo de guetos y diferentes parroquias ideológicas con un entorno enrarecido, porque así no sale nada positivo de ello. Esta es mi voluntad. Y creo que debería ser la voluntad de los camaradas que quieran luchar en el anarquismo de acción como minoría anarquista y revolucionaria no sistémica y que no quieran cimentarse en el dogmatismo, y tratar de cambiar y crear un nuevo paradigma desde la base.
Así como creo que es importante cambiar el enfoque para destruir la distinción entre legal e ilegal como una concepción jerárquica de lo que uno hace o lo que hacen los demás. Para no juzgar o reivindicar entonces, en retrospectiva, tal o cual forma de acción con el copyright de la tendencia anarquista. Y por tanto la realización práctica de una percepción naciente para asegurar que las jerarquías de los medios de lucha puedan ser eliminadas, pero a través de la praxis, la acción, en la diversidad del anarquismo. Para que cada individualidad pueda ser en la diversidad, parte de la totalidad del anarquismo de acción. Y no el seguir polarizando el anarquismo de acción.
Me gusta esta herramienta metodológica porque, además de útil y cualitativa, en la práctica tiene características de apertura e inclusión, no obedece a una tendencia exclusiva de anarquía, sea nueva o vieja, al contrario, la deja abierta a quienes han elegido asumir el complejo de estos llamados y propuestas para que cada uno pueda actuar según las condiciones que quiera y en la forma que cada individualidad y comunidad elija hacerlo. Esto es informalidad para mí. A mí me parecen los fundamentos de la horizontalidad del anarquismo. Y esto no significa que no haya debates animados ni críticas constructivas, e incluso críticas fuertes. También debemos ser conscientes de que no podemos homogeneizarlo todo, debemos elegir también con quién, por qué y cómo: «porque un movimiento, incluso revolucionario, tiene sus propias necesidades de desarrollo, ciertas diferencias de opinión, ciertas reservas legítimas, que no pueden ser apartado y todo de una vez” (A.M.B.).
Y este método lo sabemos hacer, como lo hemos experimentado en varias luchas puntuales, o generales como fue el llamado de Alfredo. Para L’Aquila para cerrar la sección de AS2 y la de Diciembre Negro.
A pesar de la diversidad de contextos y de objetivos específicos, es el mismo método que se utilizó en Grecia, de un puñado de presos apoyados por una asamblea de camaradas que condujo a la abolición de las prisiones especiales, a la reducción de la ley contra el “cubrirse» durante las manifestaciones y el del ADN. No exactamente migajas. Sin embargo, algunos camaradas no dejaron de subrayar las limitaciones, que todavía existen hoy, de este método. Creo que hay que perfeccionar el método, no los límites. Y dejar de perseguir la habitual emergencia, y saber reproducir cuidadosamente diferentes herramientas metodológicas.
Creo que sigue siendo una buena dirección metodológica articularse, y lo hemos hecho más de una vez de manera pragmática en una coexistencia creativa de camaradas con diferentes orígenes y posiciones ideológicas y con diferentes concepciones del anarquismo práctico. Y el resultado, tanto en lo positivo como en lo negativo, nos guste o no, es el resultado de todos esos anarquistas que quisieron luchar juntos en la diversidad para crear esto. Pero ojo, estas son las fuerzas reales que hemos podido crear y desplegar, ni más ni menos. Y creo que es a partir de ellos que debemos reempezar de nuevo, analizándolos, perfeccionándolos y finalmente reproduciéndolos metodológicamente para incrementarlos cualitativamente.
Como prisionero:
“En las interminables horas de la dimensión muerta y desolada de la prisión, a menudo intentamos analizar aquellos datos que conciernen a realidades externas, a pesar de los pocos estímulos que nos llegan. La observación, análisis, uso y seguimiento de eventos que suceden en una dimensión espacio-temporal paralela es una condición que no debe ser tratada de manera limitada sino con esfuerzos constantes para conectar con compañeros más allá de los muros que llevan a cabo sus luchas. contra la autoridad»
Nikos Romanos, “Ataco, luego existo”
Es por eso que, como preso anarquista, con mis limitaciones sigo luchando-viviendo con pensamiento y acción. Siendo consciente de que estos análisis y observaciones mías siempre se filtran por el ojo de la cerradura de la celda y pueden fácilmente ser equivocadas por los límites impuestos por el aislamiento de la prisión. Pero eso no significa que dejemos de intentar hacer análisis o intentar conectarnos con nuestros compañeros y diferentes luchas. Sin embargo, sin una continuidad de intercambio mutuo, de análisis en profundidad entre afuera-adentro y adentro-afuera, los debates relacionales de hecho se estancan y los camaradas quedan fuera de los caminos y discusiones y de los vínculos y conexiones con el adentro-afuera y fuera-adentro y no logran contribuir ni formular metodologías. Creo que estas herramientas metodológicas para conectar con los compañeros son necesarias.
Solidaridad con los prisioneros palestinos encarcelados a manos de los estados belicosos de Israel y la complicidad de Italia.
Solidaridad con la resistencia de los palestinos oprimidos que han resistido al colonialismo israelí y occidental con guerras de guerrillas armadas durante 75 años.
Solidaridad con quienes luchan contra el racismo, el colonialismo, el
apartheid, la guerra que comienza desde aquí.
Solidaridad con los antifascistas en Hungría.
La solidaridad con mis camaradas juzgados por la mani en el Brennero.
Solidaridad con nuestros compañeros Mónica Caballero, Francisco Solar y
Marcelo Villarroel.
Solidaridad con Juan Aliste, Joaquín García y Juan Flores.
¡Solidaridad con los compañeros presos de Chile, Grecia, Rusia,
Bielorrusia y Ucrania, solidaridad revolucionaria!
¡Solidaridad con los presos mapuche!
Desclasificación de Alfredo Cospito del 41bis
Solidaridad para Alfredo y Anna.
Contra el 41bis que aniquila a los presos encerrados.
Solidaridad internacional con los prisioneros de la lucha social en todo el mundo.
“hay que luchar y luchar para que se elimine la desproporción”
¡Por la propagación de prácticas revolucionarias de solidaridad!
Y, sea cual sea el camino que tomemos, ¡siempre con el corazón y por la anarquía!
18/03/2024
Prisión de Terni AS2
Juan Sorroche