Actualizaciones I y II, aquí
Siguen los dos escritos de Nicola Gai censurados y retenidos por la administración penitenciaria, el segundo, en particular, es el que ha provocado el procedimiento por intento de instigación delictiva contra Nicola; citando íntegramente la sin igual prosa judicial: «por haber realizado actos directos de manera inequívoca instigando a integrantes de organizaciones anarquistas para llevar a cabo actos de violencia con finalidades terroristas en particular», utilizando la correspondencia de Sergio Stefani, también encarcelado en la prisión de Ferrara, invitaba a seguir el ejemplo de lxs integrantes de las Células del Fuego FAI/FRI griegas que, en junio del 2013, «hicieron saltar por los aires el coche de la directora de la prisión de Korydallos en Atenas» e indicando como objetivo al director de la prisión de Ferrara («informémonos de dónde aparca el director y actuemos en consecuencia») – hecho que no comprobado, dado que la carta fue objeto de censura en Ferrara, en junio del 2013. El día 29 de julio, se dispuso oficialmente la censura en la correspondencia de Sergio y Stefano.
Para más información y actualizaciones: nidieunimaitres@gmail.com
Una contribución para el encuentro del 3 de agosto en la Riottosa (Florencia, Italia)
Queridas compañeras y queridos compañeros, me he enterado con placer de los encuentros que se están llevando a cabo para organizar una presencia solidaria con motivo de nuestro proceso. Os envío este escrito que, aunque no esté pensado específicamente para estos encuentros, creo que puede dar ideas nuevas para la discusión. Tanto Alfredo como yo encontramos muy interesante que el documento «Con la cabeza alta«, que presenta los encuentros, no se centre estrictamente en nuestro caso, sino «utiliza» este episodio represivo específico para volver a discutir sobre temas importantes, como la solidaridad revolucionaria, la acción anarquista, la relación con las luchas sociales, etc. sobre lo que, desgraciadamente, últimamente se razona, o mejor dicho, sólo se razona mediante frases hechas. Nosotros sólo podemos augurarnos de que todas estas discusiones nunca pierdan de vista el aspecto práctico de la lucha anarquista, creemos que todos los razonamientos se han de abordar para que nuestra acción sea más eficaz y concreta. Acerca de lo que se nos acusa, las heridas al A. D. (administrador delegado) del Ansaldo Nucleare, nos pronunciaremos más adelante cuando inicie el proceso el 30 de octubre.
¡Fuerza, compañerxs, hay un mundo entero por demoler! ¡Viva la nueva anarquía!
Nicola Gai
23/07/2013 Ferrara
Ferrara, junio de 2013
SOBRE LA LUCHA ANTICARCELARIA
Desde hace algún tiempo es evidente que ha vuelto a escena la lucha anticarcelaria, nuevas figuras de «rebeldes sociales» aparecen en el escenario del movimiento y, entonces, se vuelve a empezar: manifestaciones, concentraciones y propuestas de boletines para dar espacio a las lamentaciones que vienen desde las mazmorras del Estado. Nada nuevo en el horizonte, la peonza, cíclicamente, que demasiado a menudo se asemeja a nuestro movimiento, rebota sobre un aspecto diferente de este mundo de mierda y vuelve a girar. El interés de lxs compañerxs se despierta, se da vida a las asambleas en las que se argumenta que necesitamos profundizar en el argumento, comprender lo que ocurre en los lugares de tortura… y ¿cuál es el resultado? Se decide ir a dar panfletos a lxs familiares de lxs presxs en los días de las visitas y se organiza una concentración que, seguramente, será un éxito, ya que lxs presxs «responderán» entusiastas y en número. A decir verdad, últimamente, al habitual guión se ha añadido un nuevo acto, en pocas palabras, asombroso: una concentración «determinada y comunicativa», ante el Ministerio de Justicia en Roma. Por más que lo piense no puedo entender que hacen lxs anarquistas ante el ministerio, cabreadxs por las palizas que tuvieron lugar en la prisión de Tolmezzo, si no están allí para prenderle fuego.
Por mucho que la cárcel sea un problema permanente, las «movilizaciones» en su contra son episodios que duran hasta que la atención de lxs compañerxs la capte otra «emergencia». O hasta que el objeto de nuestra atención (el rebelde social, el proletariado recluso, etc.) no busque un interlocutor, más o menos institucional, que considere más adecuado para satisfacer sus necesidades. Quiero dejar claro que mis consideraciones no están dictadas por el hastío personal o por afirmar algún conocimiento particular en el sector, sino por un simple dato anagráfico: He participado en varias oleadas de lucha anticarcelaria, todas nacidas con premisas similares y enfriadas de la misma manera. Recuerdo muy bien la lucha de los ergastolanos (NdT: condenados a cadena perpetua), también en ese caso hubo entusiasmo, asambleas, concentraciones, un boletín anticarcelario, después, los protagonistas de la protesta, a menudo retratados como rebeldes indomables, decidieron suspender la huelga de hambre para caminar por caminos más institucionales para resolver sus problemas: fin de todo y se empieza de nuevo con otra lucha. Pienso que es necesario pararse a pensar en por qué se repiten cíclicamente las mismas situaciones, siempre iguales en el resultado. ¿Por qué no conseguimos dar una mayor continuidad e incisión a nuestra acción? Estoy seguro de que tenemos que dejar de dejarnos llevar por las emociones, por la urgencia del momento. Jugamos a la defensiva demasiado amenudo, casi parece que la tarea de lxs anarquistas sea la de resolver los problemas del «objeto» revolucionario de turno: encarceladxs, inmigrantes, explotadxs, etc. Estoy convencido de que los anarquistas deben «simplemente» atacar, cada unx con sus propios métodos y tiempos, tratando de vivir la [….], la alegría de la destrucción sin buscar el «consenso» entre lxs explotadxs de turno. A este punto alguien podría hacerme notar que mis declaraciones son declaraciones de principios, y que todo el mundo estaría de acuerdo, pero, prácticamente, ¿qué estoy proponiendo hacer? Tomemos como ejemplo lo que está sucediendo a nuestro alrededor. La prisión es una monstruosidad tal que no necesitamos saber cada injusticia que se cometa en ella para saber que hay que destruida. No nos concentremos en estudios más o menos profundos de las transformaciones del aparato carcelario, hagamos como lxs compañerxs griegxs de la Conspiración de Células del Fuego-FAI/FRI- Banda de la Conciencia-FAI/FRI – Célula Sole-Baleno *: informémonos sobre dónde aparca el director y actuemos en consecuencia. Imitemos a lxs compañerxs chilenxs de la Célula Antiautoritaria Insurreccional – «Panagiotis Argirou» -FAI/FRI que, el 12 de mayo, golpearon la Asociación nacional de funcionarios penitenciarios en Santiago de Chile. O, si no, tomemos de ejemplo a lxs compañerxs anónimxs que, en Trento, hace unos meses, prendieron fuego a los vehículos de una empresa que especula con la comida de lxs presxs.
Si todxs estamos de acuerdo en que no hay nada más hermoso que una prisión ardiendo, armemos nuestros deseos y pongámonos a manos a la obra.
Nicola Gai
* A principios de junio se hizo saltar por los aires el coche de la directora de la cárcel de Korydallos en Atenas. Esa acción fue la primera del «Proyecto Fénix» a la que luego siguió el ataque al coche de un carcelero de la prisión en Nafplio, también en Grecia, realizado por lxs compañerxs de la Conspiración Internacional por la Venganza-FAI/FRI. El proyecto Fénix continuó posteriormente con dos acciones, una en Indonesia y otra, de nuevo, en Grecia.